La unidad y la concordia entre los miembros que integran la Junta Central Electoral (JCE) son dos elementos clave para que este organismo dedique su máxima atención a la organización de las elecciones congresionales y municipales del 16 de mayo del 2010. Hay innovaciones importantes en este proceso que debe culminar con la elección de nuevos diputados y senadores, síndicos y vice síndicos, y por primera vez presidentes de juntas municipales y representantes congresionales en el exterior. Estas novedades reclaman que se prepare una adecuada campaña de orientación ciudadana, además de los arreglos de naturaleza administrativa.
De ahí que consideramos oportuno el llamado a la unidad y la concordia que el presidente de la JCE, doctor Julio César Castaños Guzmán, hace a miembros de este organismo que han dado vida a un debate sobre asuntos internos que, aunque útil, no parece oportuno en medio de este proceso. El presidente de la JCE reconoce a los magistrados el derecho a pedir rendición de cuentas, y le confiere, además, características de deber. Es en un contexto de procura de transparencia que ha surgido el debate entre integrantes de la Junta y que deberá servir para afinar controles y procedimientos para un mejor desempeño y beneficio de todos. Acogerse a este llamado y aplazar por el momento el debate sería lo más saludable.
Cónsules en Estados Unidos
En todo Estados Unidos sólo hay cinco cónsules de la República Dominicana, y la sección consular de nuestra embajada en Washington. Muy a pesar de la amplia población de dominicanos que allí reside, más de millón y medio, y muy a pesar de la idea generalizada y equivocada de que hay un exceso de cónsules. Estos cónsules están en Nueva York, en Boston, en Chicago, en Houston y en Miami.
La verdad es que la demanda de servicios es tanta que se necesitarían más consulados y más cónsules, como nos observó gentilmente el cónsul dominicano en Nueva York, el arquitecto Eduardo Selman. Los servicios se ofrecen con vicecónsules y auxiliares que tratan de satisfacer las necesidades de una comunidad dominicana activa, laboriosa y preocupada por su nación. Afirmar que hay 25 cónsules dominicanos en Nueva York o en Estados Unidos es una imprecisión periodística que nos adelantamos a corregir.