Doha.  EFE.  El Festival de Cine de Doha (DTFF) llegó  a su fin tras haber hecho un énfasis especial en el cine árabe y con una creciente presencia de estrellas de Hollywood, en la que sólo es su segunda edición, según explicó  Chadi Zeneddine, uno de los programadores del certamen.

Salma Hayek, Robert De Niro, Kevin Spacey o Freida Pinto han sido algunos de los niños mimados de la industria cinematográfica mundial que han acudido a esta cita qatarí que, como ocurriera el pasado año, echó mano de los petrodólares para tirar la casa por la ventana y mostrar el Doha más espectacular al resto del mundo.

Según indicó a Efe Zeneddine, la diferencia de este festival respecto al pasado año estriba en que si en 2009 el certamen arrancaba, el Doha Tribeca Film Festival de ahora “se está convirtiendo ya en una auténtica plataforma para esta región, para el cine árabe y para establecer un vínculo con Occidente”.

“Queremos estar ahí para los directores de cine, que puedan exportar sus proyectos. El DTFF es como un bebé, hace falta tiempo para que crezca, pero nos sentimos muy orgullosos de esta edición. Estamos mejorando”, dijo.