Un millón de pesos para Fe y Alegría
y el centro educativo Cristo Obrero

Un millón de pesos para Fe y Alegría<BR>y el centro educativo Cristo Obrero

La institución Fe y Alegría y el centro educativo Cristo Obrero recibieron un millón de pesos de parte de  la Asociación Popular de Ahorros y Préstamos (APAP).

La donación surge a raíz de la sensibilidad de la entidad bancaria  ante los devastadores daños causados por la tormenta Noel,  a fin de apoyar a Fe y Alegría, entidad   benéfica, localizada en la comunidad de San Cristóbal, local que sirvió como refugio a cientos de damnificados de esta tormenta.

 De igual forma, parte de los fondos también serán destinados al Centro Educativo Cristo Obrero del Batey Palmarejo en Pantoja, el cual es apadrinado por la Asociación Popular.

 El acto se llevó a cabo en las oficinas de Fe y Alegría, en el sector de Gazcue, donde  Anadivi Arbaje, encargada de comunicación de esta entidad,   recibió el aporte económico entregado por Héctor Mateo, presidente de la Junta de Directores APAP; Gustavo Ariza, vicepresidente ejecutivo de APAP, y Mónika Carvajal, directora de Riesgo Crediticio.

La Asociación Popular otorgó estos fondos como parte de su programa de apadrinamiento de este centro educativo, de modo que sus actividades de responsabilidad social se concentren en apoyar instituciones que generen  un mejor y mayor impacto en la comunidad.

Arbaje agradeció el aporte ofrecido por APAP, el cual serviría para proveer alimentación y efectos de higiene personal a los refugiados en el centro de San Cristóbal, así como a la comunidad de Palmarejo, comunidades que sufrieron grandes daños causados por la tormenta.

La encargada de comunicación de Fe y Alegría también declaró que “sin el apoyo de la Asociación Popular no podríamos llegar hasta tantos necesitados, agradecemos la confianza que han depositado en nosotros, pues ello nos motiva a no descansar y a seguir esforzándonos para mejorar las condiciones de vida de los más necesitados.”

La Asociación Popular ha estado realizando activamente diversas acciones para contribuir con los afectados del catastrófico fenómeno natural, por ello como parte de su programa de voluntariado corporativo, sus  empleados también realizaron diversas contribuciones con la compra de alimentos, agua y medicamentos para los sectores afectados de La Barquita y Manoguayabo. Las donaciones del personal de la empresa fueron distribuidas a través de las parroquias San Vicente de Paul y Nuestra Señora del Rosario.

Estas actividades forman parte del programa de  responsabilidad social de la Asociación Popular y  son parte de los valores de la institución, que lleva más de 45 años en el mercado y  busca contribuir con la mejora de la calidad de vida de las familias dominicanas.

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