El pasado sábado tipo 6:00 pm, se ponía en marcha el decreto 335-21, en el cual el presidente de la Republica declaró el 30 de mayo, efeméride del ajusticiamiento del dictador Rafael Leónidas Trujillo como “Día de la libertad”. Durante el acto, el mandatario convocó a los presentes a guardar un minuto de silencio por la memoria de los hombres y mujeres de la resistencia nacional. Además, en dicho acto, el presidente Abinader afirmó que trabaja en “desterrar para siempre los males heredados de la dictadura, como son: la violencia, la corrupción y la impunidad que sigue sufriendo nuestro país”.
De modo que, con relación a este decreto y las actividades que contiene, yo no pongo en duda las buenas intenciones del presidente Luis Abinader; sin embargo esto se parece mucho a la ley de memoria histórica de 2007 de España, donde se hacía algo muy parecido con el dictador español Francisco Franco y la cual hace exactamente lo mismo que nuestro decreto: divide la sociedad y en lugar de recordar a los héroes caídos, lo que hace es recordar al dictador Trujillo. El cual una gran parte de la sociedad de hoy ni siquiera lo conoce, ni lo conoció y tampoco le interesa conocerlo; y otra parte inclusive lo reivindica, porque si hablamos de violencia, no viví en esos tiempos pero no creo que algún delincuente se atreviera a matar para atracar; de igual forma creo que el único corrupto en la dictadura era el propio Trujillo, sin embargo hoy son miles. Y la impunidad … qué decir , andan todos los que se repartieron los bienes de Trujillo y su familia, que eran del Estado , como señoritos ,convertidos en las familias más ricas y poderosas de este país … Y para hablar de algo más reciente de corrupción e impunidad, Luis Dicent (ex director de la lotería nacional de este gobierno) todavía anda suelto…
Por lo tanto, qué libertad puede tener un pueblo que le debe el 71% de lo que produce a potencias extranjeras; qué tan libres podemos ser los dominicanos cuando hay delincuentes que te matan por un celular. Un país donde la seguridad ciudadana, la seguridad nacional, la seguridad alimenticia y la seguridad energética no estén garantizadas, no podrá ser libre, ni soberano ni independiente de potencia extranjera alguna. Juan Bosch, primer presidente constitucional post Trujillo admitió que cuando llegó al poder, la República Dominicana no le debía un “chele” a nadie.
Finalmente, pienso que los esfuerzos de tiempo y dinero del gobierno, deben concentrarse en resolver los problemas que tiene la sociedad actual. Es muy probable que a mucha gente le importe más, ir al supermercado sin alarmarse, echar combustible sin ponerse las manos en la cabeza, andar por las calles sin miedo, tener un buen sistema de seguridad social, que lo que pasó en los años del dictador… Mejor me anoto a “un minuto de silencio por las victimas del alto costo de la vida”.