Río de Janeiro, (EFE).- Una persona murió y otra resultó gravemente herida al desplomarse en la madrugada de hoy, como consecuencia de las lluvias, una edificación de dos pisos en la que dormían trece personas en la ciudad brasileña de Belo Horizonte, informaron los bomberos.

La edificación, construida sobre una ladera y que ya había sido declarada como en situación de riesgo por la Defensa Civil, se vino abajo luego de que las fuertes lluvias que caen sobre Belo Horizonte desde la semana pasada provocaran un deslizamiento de tierras en la base del predio.

Poco antes del derrumbe, sin embargo, la policía alcanzó a evacuar a seis adultos y cinco niños, entre los que se encuentra un bebé de un año, que ocupaban tres de los cuatro apartamentos de la edificación.

La policía llegó en la madrugada de este lunes al edificio alertada por una de sus habitantes, que dijo haber escuchado un fuerte ruido en la estructura de la construcción. Una pareja que ocupaba uno de los apartamentos al parecer no alcanzó a ser alertada y fue sorprendida por el deslizamiento.

Según los bomberos, un hombre de cerca de 50 años murió sepultado bajo los escombros de la edificación y su esposa, de 46 años, fue rescatada con heridas en diferentes partes del cuerpo e ingresada en un hospital en donde su estado fue declarado como estable.

Según la Defensa Civil, los habitantes de la edificación habían sido advertidos en dos oportunidades sobre los riesgos que corrían en caso de que no realizaran obras urgentes de contención del suelo en las bases de la construcción. Las fuertes lluvias que castigan desde la semana pasada el estado de Minas Gerais, del que Belo Horizonte es capital, han obligado a las autoridades a declarar 44 ciudades en estado de emergencia.

La Defensa Civil calcula que cerca de dos millones de personas han sido afectadas de diferente forma por las inundaciones y los deslizamientos, y que cerca de 10.000 tuvieron que buscar refugio en alojamientos improvisados. El deslizamiento de este lunes eleva a tres el número de muertes causadas por las lluvias en Minas Gerais desde el 13 de diciembre y a 85 el número de viviendas totalmente destruidas por las aguas.

Las autoridades del vecino estado de Río de Janeiro, también afectado por las lluvias, determinaron entre el domingo y este lunes el desalojo de diferentes viviendas construidas en áreas de riesgo y acomodaron a cerca de 300 damnificados en escuelas y gimnasios públicos.

El desalojo fue determinado en Nova Friburgo, la principal ciudad de la llamada región serrana de Río de Janeiro y que está en estado de alerta desde el domingo por las lluvias.

En esta región, con ciudades importantes como Teresópolis y Petrópolis, murieron en enero del año pasado cerca de 1.000 personas como consecuencia de deslizamientos e inundaciones provocados por fuertes temporales en la que es hasta ahora la mayor tragedia natural en la historia de Brasil. EFE