PUERTO PRINCIPE, (AFP).- Un hombre murió y otros 23 resultaron heridos cuando la policía antidisturbios actuó para dispersar disturbios a las puertas del centro de reclutamiento policial en Puerto Príncipe, se informó oficialmente.

El muerto, de 23 años, era uno de los miles que se presentaron a un llamado para integrar las nuevas fuerzas policiales haitianas, informó la policía. Las autoridades suspendieron el reclutamiento hasta el lunes, dijo el jefe policial Lyonel Trecile.

La policía antidisturbios utilizó gas y cachiporras para intentar mantener el orden, en tanto la gente les tiraba piedras. Tropas francesas intervinieron luego para restaurar la calma y tratar a los heridos.

Por otro lado, el secretario general de la ONU, Kofi Annan, solicitó el jueves la creación de una nueva misión de las Naciones Unidas para Haití, con el fin de ayudar a convertir a la nación caribeña en una «democracia funcional».

La nueva fuerza estaría constituida por 6.700 soldados de diversos países, más de 1.600 policías internacionales y expertos.

El contingente militar de la ONU reemplazaría a la fuerza multinacional de 3.600 soldados encabezada por Estados Unidos, enviada para estabilizar a Haití después de que una rebelión de tres semanas provocó que el primer presidente electo democráticamente en el país, Jean-Bertrand Aristide, huyera en febrero.

[b]Dejarían fuera partido Aristide[/b]

Un consejo que organizará las elecciones del 2005 será nombrado la próxima semana con o sin la participación del partido del ex presidente Aristide, afirmó el ayer el líder interino de Haití después de intensas negociaciones.

Integrantes del nuevo gobierno se reunieron el lunes con líderes del Partido Familia Lavalas de Aristide durante casi 10 horas.

Lavalas se había negado a participar en el consejo a menos que se cumplieran varias exigencias, incluyendo la liberación de miembros del partido arrestados en relación con investigaciones de corrupción y homicidio, y la cancelación de una prohibición para viajar para los funcionarios del partido.

[b]Lula enviaría tropas[/b]

El presidente Luiz Inacio Lula da Silva condicionó ayer la participación de Brasil en una fuerza multinacional de paz de la ONU para Haití al «efectivo compromiso de la comunidad internacional con la reconstrucción» de ese país.

«Nuestro ofrecimiento para comandar esa misión estará condicionada al efectivo compromiso de la comunidad internacional con la reconstrucción de Haití», dijo Lula en un discurso en la cancillería con ocasión del día del diplomático.

«Nuestra misión sólo tendrá sentido si está en estricta sintonía con los países de la región», añadió.

Lula además resaltó que la «responsabilidad internacional no para en restablecer la paz en Haití».

Lula instó a una «coordinación más estrecha entre el Consejo de Seguridad y los órganos de la ONU involucrados en la reconstrucción física y en la recuperación de las instituciones políticas y sociales de los países».

«Las tragedias que hoy viven el Medio Oriente e Irak refuerzan mi convicción sobre la relevancia de un orden internacional basado en el derecho internacional, el multilateralismo y las Naciones Unidas», agregó.

Brasil está dispuesto a participar, con 1.470 hombres, en una fuerza de paz de la ONU en Haití, y también ha anunciado su disposición de comandar esa fuerza en caso de que el Consejo de Seguridad así lo determine.

El diario Correio Braziliense reveló este martes que diversas ONG, sindicatos y algunos políticos del gubernamental Partido de los Trabajadores (PT, izquierda) se oponen a que Brasil envíe tropas a Haití.

Según el rotativo, el Palacio de Planalto (sede presidencial) recibió «decenas» de mensajes electrónicos contra esa decisión gubernamental.

El presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, Eduardo Suplicy, del oficialista Partido de los Trabajadores (PT, izquierda) dijo al diario que la participación de Brasil en esa fuerza sólo debe darse si «realmente es una misión de paz con el objetivo de asegurar una transición democrática y pacífica y es aceptada por los diversos segmentos políticos de Haití».

Posiciones más radicales expresaron al diario dos diputados del PT, Ivan Valente y María José Maninha, quienes coincidieron en la necesidad de establecer con claridad qué tipo de misión cumplirían esas tropas en el país caribeño.