Un mundo nervioso despide un 2015 marcado por el terror

Un mundo nervioso despide un 2015 marcado por el terror

Una cúpula de radio por internet en las cercanías de la Torre Eiffel la noche del viernes 13 de noviembre de 2015 en París. (Foto AP/Thibault Camus)

En Bangkok, quienes celebren la llegada del año nuevo estarán flanqueados por la policía y lo harán en el lugar donde hace unos meses estalló una bomba.

En París, los residentes que se recuperan todavía de los últimos ataques terroristas tendrán una celebración más modesta que en años anteriores. Y en la capital de Bélgica, Bruselas, las autoridades, nerviosas tras frustrar lo que dijeron eran planes para atentar durante las fiestas, han cancelado todos los actos previstos para recibir el 2016. A medida que 2015 llega a su fin, muchos están deseando decir adiós a un año marcado por los ataques que sacudieron naciones enteras y dejaron los nervios a flor de piel.

Con todo, en muchos lugares se sigue adelante con las celebraciones, con algunos negándose a que el miedo les arruine la fiesta. “Seguimos teniendo este miedo, pero tenemos que seguir viviendo”, dijo la parisina Myriam Oukik. “Lo celebraremos”. A continuación, un vistazo a cómo se despide el año en todo el mundo: ——— NUEVA ZELANDA Nueva Zelanda, el primer país con un número importante de habitantes que entra en el año nuevo, recibió a 2016 realizando una cuenta atrás en los segundos previos a la medianoche siguiendo un reloj digital gigante instalado en la popular Sky Tower de Auckland. Se hicieron sonar bocinas y los asistentes lanzaron vítores cuando la torre se encendió con fuegos artificiales, con colores que cambiaban del verde al rojo y al blanco.

——— AUSTRALIA Funcionarios australianos, que luchan por contener la amenaza que suponen los extremistas nacidos en el país, animaron a quienes celebran el cambio de año a disfrutar de la noche y aseguraron que miles de policías extra patrullarán las calles de las principales ciudades. “No cambie su modo de vida”, pidió recientemente el alcalde de Melbourne, Robert Doyle, a los residentes de la segunda mayor ciudad del país, donde se espera que miles de personas se reúnan para, a pesar de las altas temperaturas, ver como cerca de 11 toneladas de fuegos artificiales iluminan el cielo. “No dejen que los acontecimientos en todo el mundo afecten al modo en que vivimos”. La ciudad rival de Melbourne, Sydney, se toma muy en serio su papel como una de las primeras grandes ciudades del mundo en recibir el año nuevo y desplegará su habitual y vistoso espectáculo. Se espera que más de un millón de personas se congreguen en su famoso puerto para asistir a un brillante espectáculo pirotécnico que incluye una colorida “cascada” que caerá del Harbour Bridge y efectos que emulan las siluetas de mariposas, pulpos y flores.

——— JAPON Fin de Año es la mayor fiesta de Japón, y millones de personas se apiñan en trenes para cambiar las ciudades por sus localidades natales donde disfrutar de platos de fideos, que simbolizan longevidad, mientras ven el concurso anual de canciones Red and White NHK. A medianoche, las familias se abrigan para visitar los templos de barrio, donde enormes campanas de bronce señalarán el inicio de 2016. Tokio está bajo alerta por motivos de seguridad este año, con carteles en el metro y otros espacios públicos que advierten a la gente que mantenga los ojos abiertos para detectar paquetes o actividades sospechosos.

——— COREAS Los surcoreanos celebrarán la llegada de 2016 con tradicionales ceremonias de campanas, fuegos artificiales y actuaciones musicales y bailes al aire libre. Miles de personas, incluyendo refugiados norcoreanos, se darán cita en una localidad próxima a la frontera con la rival Corea del Norte para asistir a uno de estos actos y desear una unificación coreana pacífica. En su mensaje de Año Nuevo, la presidenta surcoreana Park Geun-hye volvió a destacar que su gobierno está abierto al diálogo con su vecino, pero responderá con determinación a cualquier provocación de Pyongyang. Se espera que Corea del Norte celebre la entrada de 2016 con un discurso de su líder, Kim Jong Un, que los observadores externos analizan minuciosamente para intentar atisbar la dirección política que toma el hermético país.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas