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El presidente Danilo Medina promulgó el Decreto 228-13 mediante el cual se convoca al Consejo Económico, Social e Institucional que preside el monseñor Agripino Núñez Collado, para que junto al gobierno organice las discusiones y concreción del Pacto para la Reforma Educativa.

Mediante ese mismo Edicto fueron designados los ministros de la Presidencia, y el de Economía, Planificación y Desarrollo, para que coordinen, junto al Presidente del Consejo Económico, Social e Institucional, todo lo relativo a la metodología y organización del proceso del Pacto.

Y dos Comités, uno, llamado Comité Educativo Gubernamental, integrado por los ministros de la Presidencia, de Economía, Planificación y Desarrollo; de Educación, de Educación Superior, Ciencia y Tecnología, y por el Director del Instituto de Formación Técnico Profesional, que tendrá a su cargo la coordinación y participación de las instituciones gubernamentales a lo largo del proceso de discusión y ejecución del Pacto. Y, otro, denominado Comité Técnico de Apoyo, integrado por el Ministro sin Cartera, Antonio Isa Conde; por la Directora de la Unidad Asesora de Análisis Económico y Social del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo, doctora Magdalena Lizardi; por el Consejero del Ministerio de la Presidencia, y por cuatro miembros designados por la Comisión Ejecutiva del Consejo Económico, Social e Institucional, para darle respuesta a cualquier necesidad que surja durante el proceso.

El Gobierno ya dio a conocer su propuesta de reforma de la educación de 17 puntos y un calendario para consulta a partir del 28 de septiembre próximo.

En el  párrafo II Decreto 228-13  se establece  que “la fase de consulta debe garantizar los medios para que toda persona que tenga interés en abordar la solución de los problemas del sistema educativo pueda expresarse y participar en los términos y tiempos definidos en la metodología. Los resultados de la fase de consulta deberán ser tomados en consideración en las posteriores fases de discusión, concreción y firma de compromisos”.  Así, quedó puesta de manifiesto la intención del gobierno de Danilo Medina de propiciar la participación de todos  en la formulación y puesta en práctica de un proyecto de reforma de la educación, al igual como se hizo con el Plan Decenal 1993-2003.

No es nuestro propósito impartir cátedras acerca de lo que es una reforma de la educación. Esta crónica no es el sitio adecuado para ello. Más bien, deseamos expresar algunos señalamientos en torno a la concreción  y firma de un nuevo Pacto Nacional para la Reforma Educativa. Se trata de un renovado intento de elevar la calidad de nuestro sistema de instrucción pública a los niveles que todos deseamos, y, en última instancia, de “disminuir pobreza, combatir inequidades y fomentar el ejercicio de la ciudadanía plena”

Teniendo el Plan Decenal de Educación como referente, el Pacto habrá de desarrollarse en circunstancias mucho más favorables que en el pasado reciente: En estos momentos, el Ministerio de Educación está ejecutando el presupuesto más alto de la historia de esa dependencia estatal; y, distinto a lo que ocurría antes, es el presidente de la República en persona quien  encabeza el movimiento de reforma en pos de  elevar la calidad de nuestro Sistema de Instrucción Pública. Así las cosas, no nos cabe dudas de que al final de la presente gestión se habrán construido miles de aulas y mejorado la infraestructura escolar, y dotadas todas las escuelas públicas de mobiliario y, equipos y materiales tecnológicos; también, habrá finalizado con éxito el programa de capacitación y formación de miles de maestros;  y mejorado las condiciones de vida y de trabajo de éstos.

Las tandas extendidas y el cumplimiento del calendario escolar serán realidades, lo mismo que  el desayuno, almuerzo y ropero escolar. Seguros estamos que a corto plazo se hará realidad el sueño de todos de disponer de una educación pública en un proceso permanente de mejoramiento de la calidad, con cobertura y equidad, pertinencia y trascendencia, y sobre todo, con transparencia y rendición de cuentas.