La gastronomía es algo que por lo general asociamos con la intimidad del hogar.
Esto precisamente es lo que querían lograr los organizadores del pabellón Libro Cocina de la vigésima Feria Internacional del Libro Santo Domingo 2017, quienes han logrado la sinergia perfecta entre libros y gastronomía.
El olor de la cocción de los alimentos suele atraer a los visitantes, quienes no pueden resistirse a la curiosidad que supone saber qué se está cocinando.
Este hermoso pabellón, creado en un estilo minimalista, práctico, fresco y dotado con seis mesas para 36 comensales, contiene todo lo necesario para elaborar los alimentos que degustan día a día estudiantes de diversas escuelas así como los homenajeados del día.
Juan José Pita, coordinador operativo de este espacio, es el encargado -junto a un equipo conformado por once personas, incluyendo un chef- de elaborar diariamente un desayuno y un almuerzo, así como los bocados que se sirven luego de cada conversatorio, charla o puesta en circulación de libros de cocina.
Él detalla que dentro del menú servido diariamente se elaboran platos propios de la cocina criolla dominicana, ya que enaltecerla es uno de los objetivos fundamentales de este pabellón.
Pita señala que para garantizar la calidad de los alimentos servidos, los productos elegidos son de primera calidad y se hace mercado diariamente.
Patricia Minalla, asistente de coordinación del área literaria de este “stand”, señaló que el fin de este pabellón es resaltar la gastronomía dominicana, pero no solo centrada en los platos, sino también en las personas que la hacen posible, como los chef y cocineros.
Manifestó que dentro del programa que se realiza en Libro Cocina se contemplan charlas sobre nutrición, conferencias, entrevistas a autores de libros de cocina, conversatorios y “cooking shows”, así como cuenta cuentos con temas asociados a la gastronomía para los niños.
Este año el pabellón está dedicado al chef Leandro Díaz.
Si decide visitar la feria no olvide pasar por este pabellón, sus amables coordinadores le ofrecerán un café, un refresco o agua, todo con una sonrisa.