Un problema de hábitos

 Un problema de hábitos

Por Margarita Quiroz
Si con frecuencia usted se come las uñas, muerde los lapiceros o hace cualquier mueca a la hora de realizar una actividad doméstica o deportiva, sin saberlo está ejecutando lo que los odontólogos llaman fuerzas parafuncionales del sistema masticatorio, un trastorno que altera de forma sensible la salud bucal y que de no ser tratado a tiempo puede generar una serie de complicaciones.

El sistema masticatorio obviamente tiene como encomienda triturar los alimentos en un periodo de tiempo, que entre las tres comidas  habituales, incluyendo las meriendas, no excede de una duración de más de tres horas por día; de modo que si la persona desarrolla hábitos que prolongan estos movimientos en forma repetitiva y sostenida, los tejidos dentales y musculares se resisten, originándose un extraño dolor en la mandíbula. En otros casos no existen síntomas que permitan al especialista detectar con facilidad la magnitud del problema que se está incubando.

Así lo explica el odontólogo e implantólogo Arnaldo González quien además señala que cuando una persona tiene problemas de paranfunción masticatoria, con el paso del tiempo se originan fracturas de las coronas, puentes, desgaste de dientes naturales, astillamiento de los rebordes, pérdida del hueso alveolar, movilidad de los dientes, pérdida de implantes dentarios y problemas de la articulación de la mandíbula.

Para el especialista, con más de 41 años de experiencia, la parafunción puede tener origen sistémico, psicológico y ocupacional. Además, la forma y distribución de los dientes en la arcada dentaria y algunos trabajos odontólogicos mal realizados pueden producir este tipo de anomalía en el sistema masticatorio.

La causa sistémica incluye crisis de epilepsia y psicológica, que es la más común, se evidencia cuando el paciente reacciona ante la ansiedad, tensión o estrés apretando los dientes. En tanto, la ocupacional se evidencia cuando la persona se somete a largas horas de estrés en el campo laboral y esto hace que consciente o inconscientemente mueva la boca.

Existen otros hábitos, de acuerdo al especialista, que son masticar la cabeza de los lapiceros, abrir pinchos con la boca, el uso de gomas de mascar y pipa, así como masticar tabaco, como es el caso de los galleros y peloteros.

No obstante, según González, focalizar la parafunción como un problema de hábito en un gran porcentaje de situaciones es correcto, no importa que éstos provengan de fuentes ocupacionales o profesionales. 

Los patrones de desgaste de los dientes sugieren que la mayor actividad parafuncional se da en posiciones excéntricas. Se producen pocos contactos dentarios durante esta actividad y a menudo, los cóndilos se apartan de una posición estable. La actividad que se da en este tipo de posición mandibular aplica una mayor tensión al sistema masticatorio y lo vuelve más vulnerable a las alteraciones. Esta actividad causa la aplicación de fuerzas en unos pocos dientes en una posición articular inestable y , por lo tanto, existe una mayor probabilidad de efectos patológicos en los dientes y las articulaciones.

 Tratamiento

Para el tratamiento de los problemas paranfucionales afortunadamente existe un abanico de soluciones, a veces son de fácil manejo, pero otras no. En muchos casos el tratamiento resulta costoso y prolongado.

En ocasiones y según la magnitud del problema, los odontólogos utilizan un aparato ortopédico denominado plano relajador. Éste lo recomiendan para que las personas que están sometidas a tratamientos psiquíatricos puedan dormir.

Pero, por lo general, los especialistas recurren a reconstruir el recorrido que hace la mandíbula con otro aparato llamado articulador ajustable o semi ajustable.

 Perfil
Arnaldo González  es odontólogo e implantólogo. Estudió en la Universidad Autónoma de Santo Domingo, pero ejerció su carrera en Estados Unidos.

Es uno de los pocos médicos dominicanos que tiene patente para operar en Estados Unidos. Allí patentó, en 1996, una presa para corte de huesos, una especie de taladro que sirve para disminuir el calor del tejido óseo al momento de hace un implante.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas