La pista de un eventual origen del coronavirus a partir de una cadena de frío es una de las alternativas que dejó hoy abierta un equipo de científicos que a principios de año realizó, por encargo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) una investigación en Wuhan sobre cómo se desencadenó la pandemia.
En su informe definitivo, publicado hoy, la misión revela que justo antes del cierre del mercado de Huanan, en Wuhan, que se ha considerado como el lugar de partida del nuevo virus, se tomaron y examinaron 923 pruebas medioambientales, de las cuales 73 dieron positivas.
“Esto revela una contaminación generalizada de las superficies con el SARS-CoV-2, compatible con la introducción del virus a través de personas, animales o productos infectados”, explica.
Se detalla que el suministro del mercado incluía productos de animales de más de 20 países conservados en una cadena de refrigeración, lo que incluye algunos que dieron positivo al SARS-CoV-2 antes del final de 2019 o en los que se encontraron “familiares cercanos” de este virus.
Pruebas realizadas durante 2020 en otros mercados de Wuhan y de mayoristas no encontró que el virus circulara entre los animales. En cambio “el virus ha sido encontrado en paquetes y productos de otros países que suministraban a China con productos congelados, lo que indica que el patógeno “puede ser llevado largas distancias en productos que forman parte de la cadena de frío”, explica el extenso informe, que plantea sus hipótesis y evidencias científicas a lo largo de 123 páginas.
Los científicos recomiendan que se hagan más análisis al respecto para trazar el origen del virus causante de la covid-19 y su ancestro más cercano. Esta pista sin duda llevara a que se hagan investigaciones de animales susceptibles a este virus en granjas del sureste de Asia, plantea el informe.