Como un homenaje a nuestro patricio Juan Pablo Duarte, haremos un resumen de la odontología en nuestra patria.

Antes de la colonización por parte de los españoles, de la Hispaniola, nuestra isla era habitada por Los Taínos; científicamente en aquellos tiempos es muy poco lo que podemos tomar como referencias; sin embargo, los dientes y demás tejidos de la cavidad oral se enfermaban.

En la cultura taína, sus dioses, conocidos como los chamanes o bohíques, personajes muy respetados en la comunidad, eran los líderes espirituales, consejeros, “médicos” y custodiaban su cultura. Sus prácticas unían de forma integral, lo físico con lo espiritual; la salud oral no era la excepción.

Desde la ingesta de hierbas y raíces medicinales, ritos… eran costumbres que les ayudaba a la población a mantenerse saludable.

En lo relacionado a la salud oral eran instruidos en una alimentación suave y equilibrada; hábitos de higiene, como enjuague con agua luego de comer, uso de espinas y ramas para higienizarse; masticar hojas y raíces que le ayudaban con el aliento, calmar dolores y procesos infecciosos.

Los problemas dentales más comunes en esa época no eran muy diferentes a los actuales, sin embargo, sin tener un diagnóstico y tratamientos efectivos para los mismos:

-Desgaste de las superficies dentales.

-Dolor de diversos orígenes, ya sea crónico o agudo.

-Traumas.

No existen reportes de tratamientos estéticos con metales preciosos en los dientes anteriores en la cultura Taína, como en otras precolombinas, sin embargo, si de su cuidado de la salud oral como parte de su bienestar y salud general.

Con la llegada de los españoles, se fueron asumiendo las costumbres de estos y es así como se incorpora el dentista / barbero a la población.

No es hasta mediados del siglo XIX que se gradúa el primer dentista dominicano, Dr. José Reyes Castillo, estudió en Francia, marcando así un hito en la Odontología Dominicana.

A partir de ese momento la odontología dominicana ha ido creciendo de acuerdo a los avances tecnológicos y científicos, con más de una decena de universidades que imparten el grado de la mismas y otras tantas donde el profesional de la salud oral puede cursar todas las especialidades.

Siendo referente de la odontología a nivel de Latinoamérica y el mundo.

Hoy día los profesionales de la salud oral están agrupados en el Colegio Dominicano de Odontología y su ejercicio es regido por normas claras y precisas que garantizan la buena práctica a la población. Por otro lado, los dominicanos, gozamos de cobertura en los servicios básicos de prevención en el Seguro Familiar de Salud ya sea en el régimen contributivo o subsidiado a través de nuestra ley de Seguridad Social, lo cual es una herramienta que facilita la prevención desde el momento de la concepción,

En el área de investigación científica se han dado los primeros pasos, así como un arduo trabajo en la prevención.

Hoy en día son miles de pacientes que llegan a través del turismo a buscar servicios odontológicos a nuestro país, debido principalmente a la buena práctica, garantía y la combinación de vacaciones y economía.

Celebremos con orgullo la calidad del odontólogo dominicano y de su práctica en esta tierra por la que Juan Pablo Duarte tanto lucho.

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