Un recorrido por la historia de Premios Soberano

Un recorrido por la historia de Premios Soberano

Premios Soberano celebrará hoy una gala más en la que se galardonará a los mejores artistas del país, en un espectáculo que se ha constituido en uno de los más vistos y esperados en República Dominicana.

De ahí que la ocasión sea propicia para analizar cuál ha sido la evolución de los premios desde su origen. 

En ese sentido, según datos publicados por los organizadores de los premios, en 1985, específicamente el día 4 de abril, fue celebrada la primera ceremonia del Casandra en el Cine Teatro Olimpia.

Además, durante los primeros dos años la entrega de los antiguos Casandra, en la actualidad Premios Soberano, se realizó en el Teatro Olimpia.

Mientras que la tercera ceremonia de premiación se hizo en el Palacio de Bellas Artes, donde 36 artistas resultaron ganadores.

Más adelante, ya en 1992, fue la primera ocasión en que dos artistas recibieron el máximo galardón por su transcendencia. Los galardonados fueron Ramón Orlando y Juan Luis Guerra. Desde esta fecha los premios se entregan en el Teatro Nacional.

Evolución. «Los premios no han dejado de evolucionar: A finales de 2011, ACROARTE anunció la introducción de reformas importantes, creando la categoría el Soberano del Público, un galardón otorgado exclusivamente por el voto popular de la gente», indica la breve reseña publicada por la producción del premio en su página web. (http://premiosoberano.com/)

Agrega que además se crearon las categorías de Comunicador en el Exterior y la de Programa Regional de Entretenimiento, donde compiten las producciones que se generan en el interior del país.

En cuanto al premio máximo, se acordó que una persona podrá ganar El Gran Soberano solamente una vez durante su carrera.

Cambio de nombre. A pesar de que la premiación ha mantenido parte su esencia, algo que tuvo que cambiar fue su nombre que pasó de Premios Casandra a Premios Soberano.

La razón de la modificación del nombre hecha a la premiación obedeció a una petición que hicieran los familiares de la cantante dominicana, Casandra Damirón, a los miembros de la  Asociación de Cronistas de Arte (ACROARTE).

De acuerdo la ventilación pública que se hizo del caso, los descendientes de la cantante dominicana en honor a quien los premios llevaron su nombre por 28 años, exigían parte de las ganancias económicas que genera la premiación.

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