Una vez Alex Rodríguez dijo que la presión de ser mánager en Nueva York es similar a la de ser presidente de los Estados Unidos.

Ese reto lo ha tenido el dominicano Luis Rojas como dirigente de los Metros de Nueva York.

Al entrar a su segundo año camina sin presión luego de una apertura con turbulencias.
Rojas arrancó como mánager de los Metros el año pasado y el equipo decepcionó poniendo en peligro su puesto.

De hecho, cuando se produjo el cambio de dueño, Rojas tuvo que esperar para su confirmación.
“Fue una experiencia increíble. Primero, una temporada recortada por la pandemia y muchos jugadores lastimados”, recordó Rojas.

Sin embargo, el capataz dominicano sabía que lo mejor de su calidad como estratega estaba por llegar y llegó.
Ahora los Mets saborean estar en la primera posición de la división Este de la Liga Nacional y eso lo tiene muy tranquilo.

“Solo hay 30 puestos para mánagers, y yo tengo uno de ellos, eso me hace sentir privilegiado”, comentó.
“Mi padre (Felipe) fue mánager y seguir sus pasos me hace sentir muy orgulloso”, agregó.
Sobre lo que está pasando con su carrera, Rojas lo define de este forma: “Un sueño hecho realidad.

Sobre la segunda mitad de la temporada no se adelanta a la llegada de otros jugadores vía cambio, porque según sus palabras, eso le toca a la gerencia.
Rojas cree mucho en el potencial de jugadores como Pete Alonso y Francisco Lindor.

Con respecto a lanzador Jacob deGrom se siente altamente feliz.
“Cuando él lanza nos da muchos chances de poder ganar el partido”, dijo Rojas al ser entrevistado en Nueva York por el periodista dominicano John Sand.

“Esto de ser dirigente no es fácil, hay que estar atento a lo que pasa día a día para garantizar el futuro. Aquí hay mucha hambre de ganar entre los jugadores y eso ayuda al mánager”, afirmó en tono seguro.

Rojas quiere seguir los pasos de otros dirigentes dominicanos como Felipe Rojas Alou, Tony Peña y Manny Acta. “Ellos se alegran por mí. Siento ese respaldo”, expresó Rojas.