Un extenso y emocionante recorrido por 18 de los 50 estados que conjugan la gran diversidad natural y arquitectónica de los Estados Unidos de América (USA) es una experiencia inolvidable, digna de compartir.
El tour inició en Nueva York, después de un paseo por Manhattan, en la desembocadura del río Hudson, donde se encuentra el monumento de la Estatua de la Libertad, patrimonio de la Humanidad, un obsequio de Francia en 1886, para conmemorar el centenario de la Declaración de Independencia de Estados Unidos.
El segundo día encendimos los motores en la madrugada con destino a la ciudad de Niceville, en el condado de Okaloosa en la Florida. En la ruta, los primeros estados en conocer fueron Nueva Jersey, Delaware, Maryland, Pennsylvania y Virginia, hasta llegar a Washington D.C. y contemplar de cerca las dos edificaciones que representan el máximo poder de la unión americana: el Capitolio y la Casa Blanca.
El viaje por las amplias y bien señalizadas autopistas continuó hacia las dos Carolinas, primero la del Norte, y después de más de cinco horas a más de 70 millas entramos a Carolina del Sur, uno de los estados líderes en producción textil y el segundo mayor productor de tabaco de Estados Unidos, después de sus vecinos de Carolina del Norte, el vigésimo octavo mayor en Estados Unidos y el décimo más poblado de los 50 estados de la unión. Su capital es Raleigh, y su mayor ciudad es Charlotte.
Luego entramos al estado de Georgia, con una gran parte de su territorio cubierto de bosques, principalmente pinos, melocotones y magnolias. Ya en la noche, penetramos al estado de Florida, por la ciudad de Jacksonville.
Arribamos a nuestro primer destino, Niceville, Florida, alrededor de las 12:00 de la noche, para completar diecisiete horas de autopistas en un solo día en esta primera parte del recorrido.
Segunda jornada. Después de disfrutar una semana de las hermosas playas de finas arenas de esta ciudad de la Florida, pusimos el frente hacia San Antonio, Texas, en una ruta que toma doce horas, pasando por los estados de Alabama, Mississipi y Lousiana.
Texas es el estado en territorio continental más extenso de Estados Unidos. La capital es Austin, aunque la ciudad más poblada es Houston. Nuestra permanencia fue en San Antonio, cuyos puntos turísticos son el Museo El Álamo, el Río San Antonio (un paseo en yate en el centro de la ciudad) y la Torre de Las Américas (con una impresionante vista de gran parte de la ciudad).
Tercera jornada. El regreso a Nueva York tomó dos días, con par de noches para dormir. En esa ruta de regreso tocamos los siguientes estados: Arkansas y su capital Little Rock, Tennessee (pasando por Memphis, ciudad natal del fenecido astro Elvis Presley), Kentucky (región que vive de la agricultura y el turismo), West Virginia (emocionante por la neblina en sus montañas), para repetir Maryland, Pennsylvania y Nueva Jersey llegando a la Gran Manzana tras recorrer unas 4 500 millas de hermosos paisajes, largos puentes, diversidad gastronómica y orígenes que ponen de relieve la realidad migratoria de Estados Unidos.