Lynn Johnson es una psicoterapeuta cuáquera residente en Hartford, Connecticut y con quien he tenido el placer de compartir.
The Hartford News republicó un artículo de su autoría.
Y por su alto valor, también hago lo mismo. He visto que sus planteamientos son pertinentes también a la realidad de un país como República Dominicana.
Esta es su opinión:
“Estoy cansada de que me digan que vote por los demócratas o republicanos para recuperar o mantener la Cámara de Representantes y el Senado. No quiero votar solo por afiliación partidista, sino por mujeres y hombres que se esfuercen por servir honestamente a nuestro país.
“Respeto tanto los valores conservadores como los liberales, pero necesito líderes con sabiduría e integridad. Me enoja ver que el dinero y la publicidad determinan quién gana las elecciones.
“Estoy lista para una democracia real, donde seleccionemos a nuestros legisladores en función de sus méritos en lugar de su riqueza, o la riqueza de sus seguidores. Estoy asqueada por la fealdad y la vulgaridad de ambos lados.
“Busco una discusión abierta y una reflexión seria sobre las soluciones a los desafíos que enfrentamos todos. Estoy feliz cuando nos escuchamos con respeto y diálogo con civilidad. Estoy horrorizada por la intimidación, especialmente por la burla a los vulnerables de nuestra sociedad. Estoy desconsolada por la perpetuidad de la violencia armada y la flagrante agresión sexual. Y muy cansada de ver a los rojos contra los azules, el norte contra el sur, el blanco contra el negro, la discriminación religiosa, étnica y sexual.
“Anhelo el reconocimiento de que somos una sola persona. Tenemos los mismos sentimientos, las mismas necesidades, el mismo amor por nuestros hijos y familias; no importa nuestras creencias, habilidades, orientación sexual o el color de nuestra piel. Lamento la destrucción de los bosques que nos rodean. Lloro por la extinción de animales e insectos, la contaminación de nuestro aire y nuestras aguas.