Luego de un cálido recibimiento en el Aeropuerto Internacional de Las Américas a su llegada al país desde Vietnam,  Marianne Cruz, segunda finalista del concurso Miss Universo, fue agasajada con un coctel en el restaurante Cane al que asistieron amigos, patrocinadores  y familiares.

Vestida con un traje negro largo, y la sonrisa que la caracteriza, la beldad recibió las demostraciones de cariño de los presentes, quienes la felicitaron por su excelente participación en el certamen internacional.

El encuentro inició con las palabras de Yaqui Núñez del Risco, quien ponderó las cualidades humanas y profesionales de Marianne Cruz.

Posteriormente tocó el turno a la homenajeada, quien agradeció a su familia por el apoyo en toda su carrera profesional, así como a los patrocinadores, colaboradores y todo el equipo que estuvo  detrás de su participación.

Para la ocasión en el lobby del salón fue colocado un maniquí con el traje  alusivo   a un uniforme de béisbol, diseñado por Leonel Lirio y  que lució en la competencia de traje típico en Vietnam.