Una semana después de finalizada la IX Cumbre de las Américas en Los Ángeles, Estados Unidos, las aguas retoman su ritmo y es bueno ver qué se logró o pactó.

Al parecer la migración sur-norte centró las exposiciones recogidas en la “Declaración de Los Ángeles sobre Migración y Pretección”, documento final del acto firmado por 20 países. (Por cierto, el presidente dominicano Luis Abinader no firmó el texto.)

¿Y qué se pactó? De entre discursos, fotos y apretones de manos salen a relucir algunas medidas como “fortalecer las vías de migración mediante programas de trabajo temporal”, además trabajar en los planes de “reunificación familiar y la regulación de migrantes”.

Así EEUU prometió ampliar a 20 mil su cuota para refugiados. Canadá recibirá este año 50 mil trabajadores agrícolas. Mientras, México dará trabajo temporal a 20 mil centroamericanos.

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Y Costa Rica prometió proteger a cubanos, venezolanos y nicaragüenses que lleguen a sus fronteras.

En este contexto, el presidente de EEUU y anfitrión del evento, Joe Biden, fue tajante y dijo que había que “detener las formas peligrosas e ilegales en que la gente está migrando”.

Así EEUU reveló el despliegue de más de 1,300 agentes y la inversión de 50 millones de dólares en una operación para cazar “redes y coyotes” dedicados al tráfico de personas.

Muchos recuerdan las imágenes de hace unos meses de jinetes a caballo dando latigazos a inmigrantes haitianos cerca del río Bravo.

En verdad el Norte no quiere inmigrantes, quiere, de vez en cuando, mano de obra barata.