Roma.  EFE.  El diseñador italiano Roccobarocco dejó ayer una estela de colores metálicos, sobre todo morados y negros, pero también algún que otro gris plateado, sobre la pasarela de la Semana de la Moda femenina de Milán, que este jueves vivió su segunda jornada de desfiles.

Vestidos de noche y elegantes chaquetas que acompañan a faldas son las principales apuestas del modisto para el próximo otoño-invierno, cuando la mujer que ha pensado Roccobarocco lucirá unos señoriales recogidos de cabello ladeados al más puro estilo de las primeras décadas del siglo XX.

También propone algún que otro pantalón, saco y chaquetillas cortas para una mujer que también sabe dejar a un lado los momentos de elegancia, sobre todo los guantes a lo Gilda que propone, y que sabe sacar partido a su lado más juvenil e, incluso, agresivo. La oscuridad del otoño y el invierno tiñeron las propuestas.