Una fiesta de orquídeas en el Botánico

Una fiesta de orquídeas en el Botánico

Las orquídeas son quizás las plantas más atractivas para el género humano. Ricardo García, director del Jardín Botánico Nacional Dr. Rafael María Moscoso, explica que esto puede deberse a su diversidad en forma, color, tamaño y especies.
Y al tratarse de plantas tan especiales y en un estado delicado en cuanto a su conservación, no es de extrañar que tengan su propia fiesta en el Botánico, una celebración anual en colaboración con la Sociedad Dominicana de Orquideología, que arriba a su edición número 44 y que consiste en el híbrido exposición y concurso de orquídeas con charlas y actividades abiertas a toda la familia.
La Fiesta de las Orquídeas en el Jardín tendrá lugar del 10 al 13 de marzo en horario de 9:00 de la mañana a 6:00 de la tarde en el domus principal del Botánico. Habrá unos 34 premios principales en diferentes categorías y pueden participar desde comerciantes hasta aficionados, en fin, cualquier persona con una orquídea en flor. Para ello debe inscribir sus plantas el día 8 de marzo de 9:00 a 5:00 p. m. También habrá venta de orquídeas, de comida y -por supuesto- charlas educativas sobre el cultivo de estas maravillosas plantas.
El costo, de 150 pesos por persona, incluye además el tradicional paseo en tren a través del Jardín.
Orquídeas: en estado crítico. Uno de los objetivos principales de este evento, tal y como señala el director del Botánico, Ricardo García, es “motivar al amor y el cuidado por las plantas y el medio ambiente” pero en especial de las orquídeas, muchas de cuyas especies se encuentran en estado crítico, algunas incluso en riesgo de desaparecer en un lapso de apenas diez años.
Es el caso de la orquídea “Cacatica” u Oncidium Henekenii de la Línea Noroeste o las especies del género Quisqueya, en la sierra de Bahoruco.
La presidenta de la Sociedad Dominicana de Orquideología, Elizabeth Mejía, lamenta que a pesar de la gran variedad de especies con que contamos (alrededor de 350, de las cuales 135 son endémicas) la depredación y las construcciones hoteleras, en el este -especialmente en Bayahíbe- hayan “acorralado” a muchas especies endémicas. La situación ha llevado a ambas instituciones a trabajar en conjunto para la apertura de un laboratorio de cultivo in vitro en el que se podrían obtener orquídeas de forma masiva y restaurar las poblaciones en su hábitat natural. García sabe que el trabajo es arduo y considera esta actividad como una pieza clave para lograr la divulgación de estas verdades y que la población “entienda el peligro que corren estas especies y contribuya a conservarlas”.

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