Una huelga para reflexionar

Una huelga para reflexionar

¿Quién logró paralizar el país este lunes? ¿Habrá sido obra del Foro Social Alternativo y otros pequeños grupos populares, o del abanico de estratos sociales que acogió la convocatoria? ¿O habrá sido el efecto de una sintonía entre las demandas de los convocantes y la situación que está afectando a un gran número de dominicanos, con necesidades insatisfechas y escasas alternativas de solución?

El Gobierno puede darse el lujo -como parece que ha ocurrido- de subestimar a los grupos populares que convocaron el paro. Puede estimar que la adhesión obedeció más a la carga de terror que siempre acompaña estas convocatorias, que a una identificación de la gente con la causa. Si fue esto último, debería  recordar que en otras oportunidades esta misma convocatoria ha sido ignorada por la misma población que ahora sí la acogió de manera contundente y convincente.

 Las circunstancias deben mover al Gobierno a reflexionar sobre este éxito y a tomar  en cuenta la posibilidad nada remota de que el éxito del paro se ha debido a que la gente se sintió representada por quienes motorizaron la protesta. En varias partes del mundo, en circunstancias aún vigentes, convocatorias similares han resultado exitosas. El Gobierno, si quiere, puede subestimar a los  convocantes, pero la adhesión de los convocados debe moverlo a  reflexionar.

 

Las campanas anuncian crisis

Primero entraron en crisis por impago Irlanda y Grecia, y Portugal hace malabares para salir de una situación financiera muy delicada. Ahora  España e Italia se han contagiado por la precariedad financiera y  han alcanzado calificaciones de riesgo de niveles nunca  antes vistos desde que se fundó la UE. Pese a  medidas de rescate adoptadas por el FMI y el Banco Central Europeo, la amenaza  de crisis se agranda. Alemania, con la economía más sólida, observa  con comprensible recelo.

Por otro lado Estados Unidos, cuyo presidente Barack Obama  aspira a la reelección, tiene también serias  dificultades financieras. La negociación con el Congreso de mayoría republicana no parece prosperar lo suficiente. Nuestros mayores ingresos en divisas provienen del  comercio con la UE y  EEUU. ¿Estamos “blindados” para una crisis de gran envergadura en las economías de la UE y la nación norteamericana?

Publicaciones Relacionadas

Más leídas