Es irónico que en los días en que más necesitas electricidad- como los calurosos de verano o los más fríos de invierno –es justamente cuando el servicio está menos disponible.

Cuando no hay suficiente energía para todos, las compañías eléctricas ofrecen diferentes programas para estimular a los consumidores y empresas para ahorrar energía y evitar caídas de voltajes y apagones.

La iniciativa israelí Greenlet ha introducido uno de los programas de ahorro de energía más fáciles de implementar por los consumidores hasta la fecha.

“El sistema Greenlet permite a las empresas de servicios públicos establecer qué cantidad de energía se envía a las centrales eléctricas virtuales, permitiéndoles suministrar más energía, especialmente durante las horas pico”, dice Liat Shenhav, gerente de producto de Greenlet.

“Muchas empresas enfrentadas con una gran demanda, piensan que no tienen otra opción más que crear nuevas plantas para satisfacer esa demanda. Pero esto es costoso y requiere la aprobación de los reguladores y aumenta la presión en el medio ambiente”. Greenlet tiene una mejor idea: la liberación de más electricidad cuando permiten a los consumidores usar la energía de manera más eficiente.

La tecnología Greenlet permite a las empresas de servicio público y privado monitorear y micro administrar el uso doméstico de la energía, manteniendo un registro del consumo  de de energía de los electrodomésticos. Los clientes están provistos de un pequeño enchufe de dispositivo del  tamaño de los temporizadores de pared, en los cuales pueden conectar los electrodomésticos  como los aires acondicionados. Los dispositivos se  comunican con la empresa a través de la Internet, analizando el uso y permitiendo a la empresa regular  el uso del electrodoméstico- cortando la energía en intervalos o incluso apagándolo.

En retorno, los clientes obtienen un bono- como un crédito en su factura eléctrica- por cada hora kilowatt ahorrada. Ahora mismo, como parte de un programa piloto, el sistema esta colocando fichas en electrodomésticos grandes para empresas de EEUU incluyendo Austin Power, PG&E de California y  la Citizens Utility Board en las afueras de Chicago, así como una preocupante gran Costa Este que  Shenhav  no está en libertad de nombrar.

Israel Electric está en campo de prueba del sistema, con el objetivo de implementarlo a gran escala.

Descubrir energía eficiente. “Los clientes pueden ver su consumo en una página especial de Internet  que muestra cuales electrodomésticos son los más grandes consumidores de energía,” dice Shenhav.

En uno de los vídeos de la empresa, un cliente con cajas Greenlet instaladas en electrodomésticos de su casa descubre que un dispensador de agua fría y caliente es un enorme gasto de energía, engullendo el 14 por ciento de su consumo de energía del hogar. “Al apagarlo en la noche, cuando no está en uso, el cliente puede obtener un significante ahorro de energía,” dice Shenhav.

A diferencia de casi cualquier otro programa de respuesta a la demanda, Greenlet permite a los clientes instalar ellos mismos los monitores, sin la necesidad de que la empresa tenga que enviar un técnico.

Al preguntarles a los clientes si podrían dudar en permitir a sus empresas  de electricidad acceder a la información de sus electrodomésticos, Shenhav dice que la mayoría de las personas no tiene ningún reparo.

“En la mayoría de los programas en los Estados Unidos, ha habido una fuerte respuesta, con lista de espera en algunos casos,” dice ella. “Especialmente el clima económico de estos días, hay algunos clientes que están felices de ahorrar $20 o $30 dólares al mes, y están dispuestos a trabajar junto a sus empresas de servicios  locales para ahorrar dinero.

Greenlet fue fundada en  2009 por Avner Cohen y Nir Marom, y su cede central está en Tel Aviv. Con alrededor de una docena de empleados, su financiamiento para la puesta en marcha ha venido  de diversas fuentes,  incluyendo la Incubadora de Tiempo de Israel, de la cual se graduó en el 2010, así como la oficina del Jefe Científico y varios contratos con empresas en Estados Unidos e Israel.

Greenlet busca expandir sus programas para incluir más empresas en Estados Unidos, Latinoamérica y también Europa, dice Shenhav.

“Después de nuestro programa de prueba, esperamos expandirnos significativamente en los próximos años”.