Tommy Hilfiger revisa en su colección primavera de 2009 la ropa deportiva clásica, que es su fuerte, para reflejar en ella un renovado optimismo en América, en el cual los antiguos valores se convierten en nuevas tradiciones.
De esa manera los vestidos de coctel, monos, pantalones anchos y blazers aunque mantienen su espiritu clásico, se reinventan en tejidos delicados y fluidas siluetas drapeadas.
Es una propuesta que transmite la ligereza y el suave encanto de finales de los años 70 y 80 a la ropa deportiva clásica, refiere el diseñador. El look refleja una elegancia cómoda donde los vestidos ligeros y largos con tirantes trenzados pueden pasar a la playa para una celebración y las gabardinas se relajan y se hacen más amplias.
Colección de hombre
Está inspirada en una sofisticación más formal, y ha recurrido tanto a la moderación como a la libertad explosiva del estilo de los 80.
La cazadora de motociclista se reinventa en punto de algodón y una paleta de colores de elegantes tonos brillantes y cremas, mientras los trajes blancos se presentan con unas solapas ligeramente más anchas y un toque de volumen.