Dice Madelyn que no ha sido fácil ser mujer, madre, esposa, atleta, pero cuenta con el apoyo de su esposo, Saúl Taveras, que está en la selección de varones de taekwondo

Madelyn Rodríguez, el nuevo talento que se abre paso en el Taekwondo y ya acaba de obtener su primer boleto para unos Juegos Olímpicos, con apenas 23 años, tiene una historia de vida, cargada de emociones y tristezas.

Ha sabido enfrentar con gallardía los destinos de la vida y nada la detiene, ya que se define como una “mujer guerrera, trabajadora y que no se rinde”.

Narra que perdió su madre a los nueve meses de nacida y a partir de ahí su padre, Juan Andrés Rodríguez Peña, se convirtió en su todo.

“El me cuidaba, su muerte me afectó muchísimo, fue algo inesperado, era mi papá, mi tía, mi hermana, mi todo y me proveía los recursos para ir a entrenar. tenía que tomar dos casos y en ocasiones solo me daba un pasaje y tenía que caminar 20 minutos para llegar a los entrenamientos”, recuerda con orgullo.

Su entierro y un viaje

Dice que enterró a su padre el tres de septiembre de 2016 y tuvo que salir de inmediato a Santo Domingo porque tenía que viajar en la madrugada a Canadá a un Mundial Juvenil en el 2016 y no obtuvo medallas. Agrega que en el torneo mundial estaba ida en los combates y no tiraba patadas, fuera de concentración. Y apunta: “Mi abuelo no aguantó la muerte de mi papá y también murió”, apunta.

Vino embarazo

Precisa Madelyn Rodríguez que ante esa dura situación, se entera a los dos meses de la muerte de su padre que estaba embarazada de dos meses y ella lo asimila como ver una “luz al final del túnel”. “Mi niña cumplirá siete años en abril y es su primera fanática y me grita en cada combate”.

“Creo que mi niña seguirá mis pasos, al igual que el de su padre, que también hace taekwondo.

Sus inicios

Comenzó a entrenar jovencita en el ensanche Bermudez en Santiago con Elías Padilla y a nivel de selección con el entrenador Rafael Grullón, quien la trajo a Santo Domingo en el 2015 para el juvenil.

“Gané bronce en México en mi primer torneo y eso me hizo sentir muy feliz”, dice Rodríguez, quien en la escuela jugaba voleibol, pero su pasión era el taekwondo.

Oro en los Bolivarianos

Comentó que en el 2017 fue a los Juegos Bolivarianos y allí consiguió el oro. “Ahora vamos para París”, dice.