Una ola de delincuencia se ha registrado en las últimas semanas en el sector Mirador Sur, del Distrito Nacional, donde sus moradores temen salir a las calles para evitar ser presas fáciles de los desaprensivos y delincuentes.

La última víctima fue la  joven embarazada Daisy Páez, quien fue atracada  ayer en la mañana cuando regresaba desde la clínica al Residencial Joly, ubicado en la calle Leonor Feltz.

 Hasta   pasado el mediodía no había superado el momento traumático que vivió  ante el   atracador que le fue  arriba sin piedad y no le importó su condición.

Todo sucedió demasiado rápido. Cerca de las 11:30 estacionó su automóvil en el parqueo. En ese momento un joven entró vestido como mensajero y penetró al residencial, que no cuenta con un servicio de vigilancia privada.

El joven la estaba esperando en la escalera, ya que ella vive en el cuarto piso. Le fue encima, le puso una pistola en el estómago y le  arrebató la cartera y todo lo que llevaba,  incluidas las llaves de su apartamento.

Le imploró que no la matara, porque estaba embarzada y luego gritó, pero el atracador salió velozmente y se montó en su motocicleta, sin que nadie pudiera llegar en su auxilio.

En su cartera tenía documentos personales, dinero en efectivo y su celular Black-Berry.

“Es común que por aquí ocurran hechos similares. Habían robado anteriormente”, dijo la señora Páez, quien no tiene mucho tiempo residiendo en Mirador Sur.

“El atracador andaba con su bulto de mensajero y con su casco protector”, dijo.

Después de cometido el hecho y dar voz de alerta se presentaron algunos vecinos.

La llave de su automóvil  se le cayó en el forcejeo y atracador no pudo llevársela.

“Nunca pensé que me iban atracar así”, contó la atribulada mujer con los ojos llorosos.

El pasado domingo, según los vecinos, un auto estacionado en la calle Leonor Felt fue robado.

Hace un poco más de una semana, los ladrones se metieron a tres apartamentos de un residencial, donde se llevaron todo lo que pudieron.

Zoom

Los ladrones

1.  Los ladrones penetraron a tres apartamentos de un residencial y cargaron con todo lo que pudieron.

2.  Aprovecharon que  había faltado el  guardián de turno, por lo que los moradores creen que alguien tenía contacto con los ladrones.