Desde el primero de enero al 16 de julio de este año han muerto en el país 94 mujeres embarazadas, doce más que en el mismo período del año 2016, cuando fallecieron 82 mujeres en gestación.
Así lo establece el informe “Maternidad Libre y Segura en República Dominica: una deuda pendiente con los derechos de las mujeres”, que resalta que en lo que va de año murió una embarazada cada dos días.
Estas cifras, según indica el informe presentado por la Colectiva Mujer y Salud y Women’s Link Worldwide, convierten a la República Dominicana en el cuarto país de América Latina y el Caribe con las tasas más altas de mortalidad materna, según estimaciones de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
La tasa, en números de la OPS, es de 119 muertes por cada 100,000 nacidos vivos. Solo Bolivia, Haití y Saint Kitts y Nevis están peor.
Año por año. En el año 2012 murieron 165 mujeres embarazadas en el país. En el 2013, 168; en el 2014 no se reportó, en el 2015, 189; en el 2016, 168; y durante los primeros siete meses y medio de este año, 94.
Este número, advierten, es muy alto si se toma en cuenta que el 95% de las embarazadas acude en promedio a cuatro consultas prenatales y el 99% de los partos son atendidos en instituciones de salud, según Endesa 2013.
Además resaltan que, según la Organización Mundial de la Salud (2016), la mayoría de las muertes maternas son evitables.
¿Cuál es el problema? “No se les atiende a tiempo, no se les hacen valoraciones médicas integrales y adecuadas, no son atendidas por personal especializado cuando se requiere o no se les suministra el tratamiento indicado para las condiciones médicas que presentan”, argumentan.
Las cesáreas. Aunque la OMS recomienda que la tasa de partos por cesárea no supere el 15% de los partos totales, en la República Dominicana el 56% de los niños nace por esta vía, según Endesa del 2013.
Las mayores tasas de cesáreas, sin embargo, se presentan en las clínicas privadas: representan el 87% de los partos, mientras que en los hospitales públicos la incidencia es de un 46%.
Recomendaciones. El informe indica que es fundamental trabajar en políticas públicas que promuevan el acceso a la atención médica de las gestantes, así como ampliar la red de oferta de servicios y promover mejoras en la calidad de la atención médica, garantizando que esa atención esté a cargo de personal capacitado y especializado.
También, atendiendo a las recomendaciones de la OMS, hay que prevenir los embarazos no deseados y a temprana edad. Para ello, todas las mujeres deben tener acceso a los métodos anticonceptivos y a servicios de aborto seguro.
Además se debe llevar a cabo capacitaciones en parto humanizado, para evitar la violencia obstétrica y sus consecuencias.