El presidente Danilo Medina acaba de esbozar uno de los ejes de su política exterior en su reciente viaje a San José, Costa Rica. Y se trata de la importancia de la integración regional, pero cuyo fundamento sea   la calidad humana y el desarrollo de la población.

            Hablando ante  la cumbre del  Sistema de Integración Centroamericana y los Estados Unidos (SICA-EEUU), y ante  su homólogo estadounidense, Barack Obama, Medina ha manifestado su confianza en el poder de los Estados para llevar bienestar a las personas, así como en la capacidad de los gobiernos de coordinar esfuerzos y crear las condiciones necesarias para el desarrollo y la prosperidad de las familias.

            Cuando nos tocó exponer la visión de política exterior del Presidente Medina, ante la cumbre de Desarrollo Sostenible que organizó la CEPAL, en Colombia, en marzo pasado, reiteramos lo expresado por el mandatario dominicano de la importancia de la  construcción de un nuevo modelo de desarrollo para producir no solo crecimiento sino también equidad, en donde el Estado tenga un papel importante en garantizar  la calidad de vida sin discriminaciones ni exclusiones.

            Expusimos entonces que  la columna vertebral de este nuevo modelo está  en concentrar los esfuerzos en fortalecer aquellos sectores de nuestras economías con mayor potencialidad de generar puestos de trabajo dignos, entre ellos las pequeñas y medianas empresas, las cooperativas y otras formas de economía solidaria.

             El presidente Medina ha puesto en practica el concepto de economía solidaria y  la noción de  banca solidaria.

            Cuando visitó  Costa  Rica,  el presidente dominicano expresó que la República Dominicana está decidida a jugar un papel más activo en la integración centroamericana y en todos los foros multilaterales en procura de implementar una política exterior centrada en la gente y en sus necesidades.

            Aunque se trataron otros temas en el encuentro regional con el presidente Barack Obama, como el de la seguridad y el del comercio regional, fue clara la posición dominicana: hay que impulsar una política exterior que  fomente la integración, el comercio regional, que promueva la seguridad, es cierto, todo eso es importante, pero lo más relevante es que todo apunte a mejorar las condiciones de vida de la población.

            Y en eso consiste y radica la actual política exterior del presidente Medina que la gente y  el desarrollo humano sean la base de las políticas públicas en los foros internacionales.