JOSÉ ANTONIO MARTÍNEZ ROJAS
Procedente de Brasil y Venezuela, llegó a nuestro país el pasado sábado, el doctor Jan Vingerhoets, director ejecutivo de la Organización Internacional del Cacao (IICO), entidad cuya sede está en Londres, Reino Unido, y de la cual la República Dominicana es una de las partes contratantes.

El ilustre visitante, acompañado de su esposa Nelly, viene a pasar revista y a evaluar la situación actual de la cacaotera nacional, con la finalidad de estar enterado de los progresos que la misma ha experimentado desde su última visita acontecida en el año 2003, cuando se celebró en Bávaro y por primera vez en América, las reuniones del Comité Ejecutivo y del Consejo Internacional del Cacao, presidido en ese entonces por el que estas líneas escribe.

Nos había manifestado Jan en las reuniones que se desarrollaron en Kuala Lumpur, Malasia, a finales de marzo del año que discurre, que desearía visitar la finca Mallano, de cacao y café, propiedad de nuestra familia en El Rejón, Los Hidalgos, Puerto Plata, y hacia allá nos dirigimos el domingo. Nuestra firma había sido la creadora y primera exportadora del cacao tipo Hispaniola, en fecha 5 de julio de 1980. Cómo en la IICO durante varios años se han presentado los proyectos cacaoteros que ha financiado el Fondo Común de Productos Básicos (FCPB) en las instalaciones de GRIN (Ghana Research Institute) para el aprovechamiento de los desechos de cacao, especialmente del cascarón de la mazorca, procedimos a enseñarle un artefacto de nuestra invención, que tritura y convierte la cáscara en un producto que puede ser utilizado en un 11% para alimento para ganado.

Asimismo, previamente le habíamos mostrado un secador y clasificador de cacao que se encuentra en su fase final y con el cual pretendemos preparar en un día como máximo, el cacao destinado a la exportación, después de fermentado, y no los cinco o seis que actualmente se emplean en su elaboración.

A decir verdad, nuestro amigo Jan nos había conocido en la faceta de delegado en las diferentes reuniones, asambleas y cónclaves internacionales de cacao y no sabía que en nuestro país un productor pudiera, no sólo tener una plantación modelo, sino que construyera los equipos sofisticados necesarios para el procesamiento post-cosecha indispensable para poderse producir un cacao de inmejorable calidad, especialmente el tipo Hispaniola y el orgánico.

El martes le tocó visitar la Comisión Nacional del Cacao a primeras horas, en donde recibió las atenciones del nuevo secretario ejecutivo, Gregorio García Salazar, y su personal de apoyo. A seguidas nos trasladamos a la sede de la Secretaría de Estado de Agricultura, en donde la primera visita obligada fue la del Departamento de Cacao, donde su director, el agrónomo Diego Borbón, se explayó sobre los programas y proyectos que se realizan en conjunción con la Comisión Nacional del Cacao.

La visita siguiente fue al señor secretario de Agricultura, agrónomo Salvador Jiménez (a) Chío, quien durante más de una hora departió con el visitante. Le explicó el interés que tenía el señor Presidente de la República, doctor Leonel Fernández, en establecer nuestro cacao como “Marca País”.

Después, lo invitó a compartir un regio almuerzo que en su honor le ofrecía en el Restaurante Vesuvio conjuntamente con los demás miembros de la Comisión. La jornada terminó cuando se efectuó una visita al puerto multimodal Caucedo, en donde pudo constatar la profesionalidad y destreza con la cual allí se maneja la carga dominicana de exportación.

Como en este tipo de visita no se debe desdeñar las estaciones experimentales y las instalaciones de los empresarios e industriales que se involucran en el renglón cacao, visitó la finca experimental Mata Larga, en la provincia Duarte, actualmente manejada por el Instituto Dominicano de Investigaciones Agropecuarias y Forestales (IDIAF), en donde pudo comprobar el selecto jardín clonal que utiliza esa entidad para mejorar la productividad y la calidad de nuestra cacaocultura. Estando en la zona, continuó visitando las instalaciones de Comercial Roig, para terminar en Ojo de Agua, Salcedo, en la Asociación de Productores de Cacao del Cibao (APROCACI), donde pudo evaluar el cuidadoso proceso que se le dispensa al cacao orgánico destinado a la exportación.

Dentro de las organizaciones internacionales, se les dedica mucha atención al cooperativismo y el desarrollo sostenido de las asociaciones de pequeños cultivadores. En tal virtud, visitó las modernas instalaciones de la Confederación Nacional de Cacaocultores Dominicanos (CONACADO), en las cercanías de Yamasá, entidad que se ha convertido por su ingente esfuerzo, en la mayor exportadora de cacao bio-orgánico del mundo, contándose entre las entidades líderes en el mercado solidario.

No podía tampoco dejar de visitar la firma que realiza las mayores exportaciones de cacao en grano y que en sus explotaciones cacaoteras posee los más avanzados métodos de fermentación y secado existentes en el país, la Nazario Rizek. Cuenta también con un laboratorio y personal y equipos para fabricar sus propias instalaciones. Además ha llegado a un acuerdo comercial con la firma francesa Michel Cluizel para que ésta fabrique un chocolate negro de alta calidad procedente de su finca denominada Los Ancones, el cual tiene un elevado precio de adquisición al público.

Para terminar esta fructífera y agotadora agenda, el director ejecutivo visitó en la capital dominicana, las industrias Cortés Hnos. & Co.,  y Munné & Co., donde pudo aquilatar la buena calidad de los productos terminados que elaboran estas dos fábricas chocolateras que cuentan con un aval de más de sesenta años en el mercado, las cuales son las mayores responsables para que se aumente el consumo de cacao en el país, como lo propicia la ICCO y la Alianza de Países Productores de Cacao (COPAL).

Cuando llevamos al distinguido visitante y su esposa al aeropuerto le preguntamos. Jan ¿Qué impresiones te llevas de la visita al país? En verdad, he quedado sorprendido de todo lo que he visto y de las explicaciones que se me han dado. Desde ahora veré a vuestro pequeño pero laborioso país con otra óptica. Entonces le recordamos que esperamos su reacción positiva cuando en Londres, en enero de 2008 se conozca la petición dominicana, de que nuestro cacao sea reconocido mundialmente como: Fino y de aroma.