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El pasado 27 de febrero, el presidente Danilo Medina presentó las memorias de su gobierno durante el año 2017. Hay que reconocer que es una pieza bien planificada para tratar de impactar a la opinión pública y hacerle olvidar las deficiencias, irregularidades y yerros de su administración; con obvias intenciones continuistas, confirmadas por los grupos que clamaban por la reelección presidencial traídos a remolque de varios puntos del país.
En primer lugar, Medina destacó la importancia de la perseverancia como clave de éxito en su administración “con la gente y para la gente”, pero donde comenzó sus “cuentos” fue cuando afirmó que han avanzado en la salud porque estableció algunos centros de atención primaria y entregó, finalmente, una docena de hospitales reparados, después de cinco años; mientras, otros muchos intervenidos o en construcción no están en servicio, y la población padece un servicios altamente ineficientes y costosos.
Se ufana de lo que se ha hecho en educación con las tandas extendidas y la educación digital, tratando de hacer olvidar que la gran mayoría de los alumnos sigue con menos de 4 horas de clases. La entrega de computadoras solo se ve en los anuncios de televisión con que se inundan todas las estaciones durante día y noche con una publicidad costosísima y ridícula.
El Presidente destaca el crecimiento del turismo en el país, lo que es cierto, aun cuando ahora estimó que la cifra de diez millones será alcanzada en el año 2023, cuando la ofreció en el 2012 para su primer cuatrenio; en los últimos años la gran crisis en resto del Caribe por razones climáticas y sociales, así como las amenazas terroristas en Medio y Extremo Oriente han hecho al país más apetecible a norteamericanos y europeos, lo que explica en gran parte ese incremento.
Medina se ufanó de como resultado de sus “visitas sorpresas”, se incrementó la agricultura durante su gobierno, pero quiere hacer olvidar que hemos tenido un año excepcional de lluvias casi diarias que compensan ampliamente los daños que han causado los desastres naturales, pues como se ha dicho, la lluvia es el mejor ministro de Agricultura. En este caso, no obstante hubo un descuido manifiesto en la renovación de los cacaotales y en combatir los efectos del roya del café, sin que hasta el presente no hayamos sido capaces de desarrollar una política activa de exportación de excedentes agropecuarios, ni de cubrir los déficits en algunos rubros de nuestra producción agrícola y agro industrial.
El Presidente destacó una y otra vez la baja inflación y altas tasas de crecimiento del Producto Nacional Bruto, lo que al parecer no es cuento, pero no explica porque eso se contrasta con una población tiene una calidad de vida cada vez peor, con altos niveles de desempleo y salarios que en promedio no cubren la mitad del costo de la canasta familiar según el Banco Central, no obstante los cinco años de bajas en el precio del petróleo.
Pero con lo que Danilo rompió la barrera de lo imaginable fue al afirmar que nos habíamos convertido en un país de clase media, aunque “reveló” que hay grupos “vulnerables”. Al parecer la vocación cuentística del Presidente superó en éste caso todas las expectativas…