El llamado “desorden del deseo sexual hipoactivo”, en las damas es más común de lo que uno se imagina. En el marco del mismo la apatía, el desgano y la indiferencia ante la actividad sexual, pueden ser aislados o ser parte tal vez de un cuadro mayor, como podría ser una depresión enmascarada, que está “debutando” con disminución de la libido (apetito sexual) en esa dama, quien experimenta una extremada inapetencia amatoria y convierte su tálamo en un refugio de fríos pingüinos propios de la lejana y glaseada antártica. Si aceptamos las cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre las depresiones, esta condición de gran tristeza mental, más común en las damas, ocupará para el 2020 los primeros lugares en morbilidad, ya sean por factores de vulnerabilidad genética o la reacción individual ante elementos estresantes.
Debemos de aceptar que para la actividad sexual, los hombres somos mucho más primarios y simples que las complejas, sensibles y delicadas damas, no sin razón la Administración para los Alimentos y Medicamentos, la exigente FDA norteamericana, ha aprobado para la disfunción eréctil masculina 36 medicamentos para procurar mejorar la salud sexual del hombre y ésta, la flibensarina, es la primera para las damas. Esto no es por discriminación ni mucho menos por violencia de género, ni que el mercado masculino sea de más rentabilidad.
No, las razones reales son las grandes complejidades del funcionamiento del cerebro femenino ante la tan gratificante actividad sexual.
La nueva medicación ayuda en la falta de deseo sexual de las damas, aunque por mercadeo inteligente de sus productores la llaman la “viagra femenina” o la pastilla rosa, pero no tiene ninguna semejanza en la forma de cómo actúa el sildenafil componente esencial de la Viagra. Ésta última, la masculina, solo provee un aumento del flujo de sangre hacia los genitales masculinos, pero no influye en el deseo sexual del hombre, lo que conocemos como la libido, lo que significa en buen español que si usted se toma esa pastilla “mágica” masculina sin un estímulo adicional adecuado usted perdió su dinero.
¿Cómo actúa la pastilla femenina? esta nueva medicación está diseñada para modular a lo largo de semanas la acción en el cerebro de dos importantes neurotransmisores, la dopamina y la serotonina, que tienen que ver con el placer, la gratificación, la satisfacción y la recompensa. Es decir, que a diferencia de la viagra que surte sus efectos en pocas horas y en algunos aun en minutos por su efecto placebo (rápidamente es un supermán, un toro de Miura), la pastilla femenina, sí interviene en mejorar la libido femenino por las complejidades de sus necesidades cerebrales ante la actividad sexual, felizmente actúa en el cerebro, por eso es que duran para verse los reales beneficios de la pastilla muchos días tal vez semanas. Sabemos que las damas para disfrutar plenamente necesitan: veneración, sosiego, venia, disposición, trato considerado, condicionamientos, estímulos, motivaciones, entorno adecuado, habilidades de sus parejas, etc., etc., etc.
Por razones de espacio debemos resumir que la libido es ese impulso cerebral, complejo e intenso que nos permite disfrutar con plenitud del placer sexual. La libido en las damas se altera más fácilmente, pues muchos son los factores adversos: los conflictos, lo moral, lo cultural, lo hormonal, la rutina, las carencias, las agresiones, cansancio, estrés, medicamentos, dolores, cefaleas, baja estima, problemas en las parejas, etc. El listado es amplio de los factores desfavorables que alteran ese gratificante “impulso” que se ve afectado, impidiendo de manera penosa el regocijo de más años de felicidad que deberían ser disfrutados plenamente (la edad no es necesariamente un óbice).
Las hormonas y los neurotransmisores que participan de la actividad sexual están presentes en el humano desde antes de uno nacer, sus altas y sus bajas son las que determinan el disfrute o no, por lo que hoy saludamos esta alternativa terapéutica, pues al menos que usted haya hecho sagrados “votos de castidad”, usted se merece una mejor gratificación de la vida, sustento que la felicidad tiene 10 íes, es: inteligente, intrasferible, individual, inexplicable, inmediata, inescrutable, indulgente, interina, íntima e inolvidable.