RIO DE JANEIRO, AFP. Los cancilleres de Unasur buscan una solución negociada para que el mandatario paraguayo Fernando Lugo, sometido a un juicio político sumarísimo por el Congreso, pueda terminar su mandato que culmina en pocos meses, dijo el viernes la presidenta de Brasil.                             

«Lo que intentan los cancilleres es crear un ambiente que viabilice una solución menos traumática para la democracia, en la medida en que el presidente Lugo tiene un mandato al que le restan entre ocho y nueve meses y no puede ser reelecto», indicó la presidenta Dilma Rousseff en una rueda de prensa. 

«En este incendio, para todos nosotros sería mejor una solución negociada o una solución que respete el derecho a la defensa» del presidente, añadió.

El juicio político iniciado el jueves para destituir a Lugo, acusado por la Cámara de Diputados de «mal desempeño» de sus funciones, es un procedimiento sumario que tendrá un veredicto la tarde de este viernes tras ser analizado por el Senado paraguayo.  

La mandataria brasileña indicó que a excepción de Guyana, todos los cancilleres que componen el bloque viajaron el jueves de noche a Asunción, por mandato de los presidentes que evaluaron la situación como «complicada».  

«Obvio que no tenemos poderes ilimitados y aún no hay una solución clara de como va a quedar» la situación, dijo Rousseff, que insistió en que los cancilleres viajaron con «mucho respeto por la soberanía de Paraguay».  

Rousseff recordó que según los protocolos de la Unasur, si hay «ruptura de orden o ruptura democrática» habrá «sanción en la participación (del país) en los órganos multilaterales», pero aclaró que no se discutió la posibilidad de aplicarlos a Paraguay.  

«No está decidido ni aún fue enteramente discutido», indicó Rousseff, que se cuidó de no calificar la situación de golpe de Estado. «No creo que sea y que contribuya que discutamos sobre una situación que aún no ocurrió y que pueda ser vista como una amenaza», siguió.  

El presidente de Ecuador, Rafael Correa, adelantó no obstante que la Unasur podría no reconocer un nuevo gobierno en Paraguay y cerrar las fronteras caso Lugo sea destituido de forma irregular en este juicio. 

La Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), cuya presidencia pro témpore está en poder de Lugo, es un órgano político conformado además de Paraguay y Brasil, por Argentina, Bolivia, Colombia, Chile, Ecuador, Guyana, Perú, Surinam, Uruguay y Venezuela.