POR LLENNIS JIMÉNEZ G.
La representante auxiliar del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), Gilka Meléndez, dijo ayer que se requiere invertir más en la educación de los jóvenes, controlar el incremento de la violencia y enfrentar el alto número de jóvenes que se embarazan a temprano edad.

Advirtió que es alarmante la cantidad de jóvenes que se embarazan a temprana edad y que abortan en el país. Indicó que esta situación está deteriorando la sociedad y rompiendo los sueños que tienen las niñas desde muy pequeña.

Planteó que los propios directores de los hospitales públicos dicen que el 30% de los embarazos son de niñas y que el problema aumenta, lo que trae consigo una alta tasa de mortalidad infantil.

Precisó que cada vez más, están saliendo embarazadas niñas y adolescentes, y se enteran de problemas de violaciones, de incestos y de muertes por abortos inducidos.  En cuanto a la violencia dijo que en todas las familias aparece alguien que ha sido violentado, asaltado o asesinado.

Precisó que la violencia ya no solo se lee en los periódicos, sino que sucede cerca: en la familia,  un amigo o en la comunidad. Meléndez encabezó el Seminario Internacional “Municipalidad, Género y Participación Política, junto a las autoridades del Ayuntamiento del Distrito Nacional, la Secretaría de Estado de la Mujer, la Agencia de Cooperación Española y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).

Sobre el problema de los embarazos, la funcionaria del UNFPA consideró que no siente que este problema se está enfrentando de una manera drástica. En la parte económica, sostuvo   falta que la gente tenga acceso a una mayor nutrición.