Transformar el sector de Cristo Rey  es la meta y la oración de la Unión de Iglesias Evangélicas Pentecostales, entidad que agrupa veinticuatro congregaciones de diversas denominaciones evangélicas. La  directiva de la Unión de Iglesias Pentecostales de Cristo Rey ha entendido que su aporte al sector  tiene mayor impacto si  articula sus acciones a las demás entidades que están luchando para lograr cambios significativos en la vida de la gente.

En este sentido, la directiva de la confraternidad encabezada por la pastora  Gilda Peralta se ha propuesto hacer contacto y mantener intercambios permanentes con las entidades comunitarias del  sector, incluyendo autoridades como el Dirección Nacional de Control de Drogas y la comandancia de la Policia Nacional.

Una muestra del acercamiento de las iglesias evangélicas a la comunidad es la relación que se ha concertado  con  la fiscalía barrial de Cristo Rey.  En esta dependencia las labores   son iniciadas con un tiempo de oración a cargo de  un grupo de lideres de la confraternidad encabezado por la pastora  Peralta. En esta instancia que busca conciliar los conflictos que se suscitan en el sector  está colaborando un voluntariado  integrado por líderes católicos, presidentes de juntas, empresarios y  personas particulares interesadas en la buena marcha de la comunidad.  Este grupo de pastores ha logrado definir una línea de acción que pone a las iglesias más cerca de la comunidad

La pastora Peralta destacó la intensa jornada de oración que se está desarrollando en todas las iglesias del sector para que, junto a las diferentes medidas que se están tomando,  se logre disminuir la delincuencia. La misionera declaró  que este estado de zozobra, no solo es producto de dificultades sociales, sino también de fuerzas espirituales, razón por la cual  los pastores de Cristo Rey están orando.

 “Las autoridades policiales nos han dicho que le apoyemos con nuestras oraciones, pues ellos han admitido que en esta lucha contra mal operan fuerzas espirituales que están más allá de sus recursos. Sigan orando…sigan orando… nos han pedido, tanto las autoridades policiales como también  la Dirección Nacional de Drogas y demás entidades con las que trabajamos”, declaró la pastora.

Gilda Peralta es una dama casada que ha procreado tres hijos. Es licenciada en Contabilidad, pero ha dedicado sus mayores esfuerzos al trabajo en el ministerio. Tiene siete años al frente de la iglesia   Tabernáculo de Amor Aposento Alto en Cristo Rey. Actualmente es la presidenta de la Unión de Iglesias Pentecostales , donde con apenas un año ha tenido logros importantes  encaminados a producir  cambios en el perfil barrial de Cristo Rey.

La posición de avanzada de la pastora Peralta  no siempre ha sido bien vistas por sus otros compañeros de ministerio, pero se ha manejado con el debido tacto para  seguir concitando el apoyo entre ellos. “No siempre cuento con el apoyo total de los pastores para algunas actividades, pero en la medida que se ven los resultados se va tomando conciencia de la misión de la iglesia para este tiempo”, afirmó.

Las iglesias de Cristo Rey están combinando su tiempo de oración con acciones solidarias que buscan reducir el nivel de deterioro social que se vive allí. En este sentido se está implementando el programa “seguridad democrática”, que es una iniciativa que busca involucrar a las iglesias, a los empresarios y demás movimientos comunitarios  para, junto a las autoridades, en la adopción de medidas para disminuir la ola actual de violencia.

La Unión de Iglesias  también ha estado operando un centro de rehabilitación de jóvenes que han caído en la drogadicción. Este centro tiene 40 jóvenes que reciben cuidado integral para su rehabilitación. El centro tiene el respaldo del doctor Cruz Jiminian.

Los pastores también han recibido varias capacitaciones del DCND para tener una mejor comprensión del problema de las drogas  y así ayudar con mayor eficiencia en el abordaje de este problema.  La  entidad tiene su oficina instalada en la prolongación Ovando, anexa al Club Payero en Cristo Rey.

Por último, la pastora Peralta se mostró de acuerdo con la instancia que demanda la anulación del Concordato y lamentó no haberse enterado a tiempo para participar de la manifestación que depositó el recurso frente al edificio de la Suprema Corte de Justicia. Justificó el pedido de anulación del Concordato porque considera que como evangélicos merecen mayor respecto y mejor trato.

SOBRE LAS CONFRATERNIDADES DE IGLESIAS

Las confraternidades de iglesias son el resultado de la  unión de las congregaciones  evangélicas de un mismo sector que buscar fortalecer el testimonio de Jesucristo  y coordinar actividades conjuntas. Surgieron a finales de la década del setenta en los barrios de la periferia de la Ciudad de Santo Domingo, y luego se extendieron a los pueblos y comunidades del interior del país.