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Las universidades dominicanas forman a miles de profesionales que no se ajustan a las demandas de un mercado laboral competitivo y exigente, lo que influye en la alta tasa de desempleo que existe en los profesionales. Otro factor que incide es la saturación de algunas carreras como las del derecho, la mercadotecnia y la contabilidad. Actualmente la UASD está incentivando a los estudiantes para que cursen diversas carreras del área de ciencias.
Las universidades dominicanas forman a miles de profesionales que no se corresponden con la demanda de un mercado laboral competitivo y exigente, lo que podría ser uno de los factores fundamentales de la alta tasa de desempleo de profesionales.
Solamente la estatal Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) ha graduado en los últimos cinco años unos 45 mil profesionales en carreras que no dan respuesta a las exigencias para el desarrollo del país.
El mercado está saturado predominantemente de profesionales de derecho, mercadotecnia y contabilidad, en tanto se produce un déficit entre la oferta y la demanda por empleo.
Expertos en temas académicos y laborales creen que la oferta de profesionales es probable que no esté acorde con las necesidades de los diversos sectores que demandan mayor nivel de calificación para competir en los mercados internacionales.
Creen que a las universidades les hace falta crear incentivos de carreras que tengan el perfil del nuevo profesional que necesitan las empresas, de cara a la competitividad de los nuevos mercados y a la globalización.
Más profesionales. La UASD graduó el pasado mes de febrero 1,517 nuevos profesionales y el miércoles invistió otros 147. En esa fecha, también la Universidad Central del Este (UCE) entregó al país 434 profesionales en diferentes ramas del saber y la Universidad Tecnológica de Santiago (UTESA) 685.
En enero de este año la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM) graduó 554 profesionales de su recinto de Santiago y la Universidad del Caribe graduó 2,097 sólo en dos investiduras celebradas una en julio y otra en diciembre de 2011.
La mayoría de esos nuevos profesionales no llega a los 30 años de edad. Precisamente los datos del Ministerio de Trabajo revelan que el mayor grupo de desempleados en el país, un 40%, tiene entre 20 y 24 años. Los jóvenes representan una población de 3.3 millones.
Otras opciones. Muchos profesionales, al no tener la oportunidad de un empleo en el sector privado ni tampoco en el ámbito público, optan por establecer un negocio propio, laborar en otra área ajena a su profesión o toman la decisión de emigrar del país por diferentes vías, legal o ilegalmente.
Según el Reporte de Desarrollo Humano 2009 de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), de 20 países latinoamericanos, la República Dominicana se sitúa en la séptima posición en fuga de cerebros.
Una de las funciones básicas de la educación superior es la de proveer los recursos humanos con la calificación necesaria para las necesidades del país, de manera que el egresado pueda insertarse eficientemente en el aparato productivo.
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Incentivos
De acuerdo con el rector de la UASD, Mateo Aquino Febrillet, esa academia incentiva a los estudiantes para que cursen carreras como química, biología, agronomía, matemática, física, enfermería, geografía, filosofía, sociología, estadística. Son carreras de pocos estudiantes pero necesarias para el desarrollo nacional. Aquino Febrillet expresa preocupación por los tantos estudiantes que optan por el derecho.
