La Unidad para la Readecuación de La Barquita y Entorno (URBE) reinició ayer el traslado de algunas familias del sector Los Guandules para dar paso al proyecto Nuevo Domingo Savio, anunciado por el presidente Danilo Medina en febrero de 2017.
Samuel Encarnación, del Movimiento de Propietarios de Viviendas de Los Guandules, condenó que para desocupar cinco casas, con cuyos propietarios ya se había negociado, el barrio fuera prácticamente situado por militares.
El dirigente comunitario considera que si las familias firman de manera voluntaria no hay necesidad de enviar todo un batallón policiaco militar al barrio, ya que esto causa indignación en vez del terror que las autoridades pretenden imponer.
Señaló que fruto de la presencia policial y militar los padres se abstuvieron de enviar sus hijos a las escuelas, ya que en el barrio se pensaba que habría un desalojo masivo.
“Entonces, si esos propietarios negociaron legalmente con Urbe, el deber de las autoridades era venir con una brigada de manera normal y tumbar las casas, sin el aparataje de ocupar todo el barrio, porque eso crea intranquilidad”, expuso.
Deploró que debido al aparataje policíaco militar los estudiantes no fueran a las escuelas, ya que en las primeras horas de ayer parecía que se trataba de una guerra.
La desocupación se produjo en la calle Ricardo Carty, vía de donde han sido desocupadas otras familias.
Todavía Urbe se encuentra en la primera parte de la desocupación, que corres ponde al barrio Los Guandules. La segunda fase corresponderá al sector de La Ciénaga, donde existe una mayor nivel de organización social de sus moradores que en sectores vecinos.