Mario Mendez 
El estado actual de las carreteras en la República Dominicana representa un riesgo para todos los que las transitan, siendo una de las principales causas del problema la falta de un mantenimiento adecuado.
“Baches, grietas, deficiente señalización e iluminación inadecuada son tan solo algunos de los obstáculos que se presentan debido a un enfoque en el mantenimiento dedicado a solucionar problemas más que a prevenirlos”, afirman los especialistas del Banco Mundial Mikel Tejada Ibanez, Rohan Shah y Leslie Nii Odartey Mills.
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El 78% de la infraestructura de los tres principales corredores es considerada insegura, según el Programa Internacional de Evaluación de Carreteras (IRAP por sus siglas en inglés). A esto se le suma la condición y composición de los vehículos, de los cuales un 43% tiene más de 20 años, y caminos vulnerables a daños e interrupciones provocados por eventos climáticos, cuya frecuencia e intensidad ha aumentado en las últimas décadas.
Ante esa realidad actual de las vías, los especialistas afirman que invertir en carreteras más seguras y de mejor calidad podría salvar vidas en la República Dominicana.
Los especialistas sostienen que pese al sólido crecimiento de la economía dominicana, en los últimos 10 años la inversión pública del país en infraestructura ha bajado del 1,5% al 0,7% del PIB. Teniendo en cuenta que la economía dominicana está basada en servicios y turismo, y está altamente expuesta al cambio climático, se estima que se necesita un 3,12% para avanzar hacia un esquema de desarrollo sostenible. “La clave, en consecuencia, está en gastar mejor e invertir más”. advierten los especialistas.
