CARACAS.  AFP.  El ex presidente colombiano Álvaro Uribe se coló en la campaña electoral venezolana al insultar al mandatario Hugo Chávez y tomar partido por su rival en las urnas en octubre, Henrique Capriles Radonski, quien marcó distancias ante una figura que suscita polémica en Venezuela.

«Asesino», «dictador»… Uribe lanzó el domingo una repentina serie de acusaciones contra Chávez mediante mensajes colgados en su cuenta de Twitter, en la que dejó además plasmado su apoyo al candidato opositor en las elecciones del 7 de octubre, empleando reiteradamente la etiqueta «CaprilesPresidente».   El ex mandatario, que presidió Colombia entre 2002 y 2010, reivindicó además el lunes su postura asegurando que seguirá opinando todos los días sobre Venezuela mientras «haya una dictadura que además protege a terroristas».  

El aludido, el presidente Chávez, no se pronunció hasta ahora acerca de estos exabruptos pronunciados por un ex dignatario con el que mantiene tensas relaciones, pero sí lo hizo Capriles Radonski, visiblemente molesto.   «Con mucho respeto a cualquier opinión de afuera (…) le digo al ex presidente Uribe como al presidente Santos, como a cualquier otro jefe de Estado o ex presidente: no se metan en el proceso electoral de Venezuela porque los venezolanos vamos a resolver nuestros problemas», dijo Capriles.   Para el oficialismo, la arremetida de Uribe proporcionó nuevos cartuchos para acusar a la oposición  de buscar apoyo en el país vecino.