El jugo de la papa cruda machacada puede colocarse en zonas doloridas del cuerpo, ayuda a cicatrizar las heridas y a bajar inflamaciones, de ahí su tradicional uso en caso de quemaduras y hasta para tratar el acné.
Colocar rodajas de papa sobre los ojos los libera del cansancio y ayuda a disimular las ojeras.