Berlín. El primer ministro francés, Manuel Valls, afirmó hoy que las misiones militares de su país contra el terrorismo yihadista, junto con la inversión pública en educación y seguridad, dificultan el cumplimiento de los límites de déficit.

El jefe del Gobierno galo realizó estas declaraciones en el Día de la Industria Alemana, un congreso organizado por la Asociación Federal de la Industria Alemana (BDI) que se celebra hoy en Berlín y en el que también ha participado la canciller Angela Merkel.

Valls afirmó que hay “objetivos más importantes” que la reducción del déficit público en los ritmos fijados por el Pacto de Estabilidad y Crecimiento (PEC) y Bruselas, como la contratación de más profesores y policías, o las obligaciones internacionales de París.

“Si reducimos nuestro presupuesto militar, ¿A dónde vamos?”, dijo tras comparar la relevancia de poder actuar en Irak contra el terrorismo yihadista o el cumplimiento de la reducción del endeudamiento.

“La disciplina presupuestaria no debe estar reñida con el interés público europeo”, sentenció Valls. No obstante, el primer ministro francés recalcó su compromiso con la estabilización presupuestaria y la consolidación fiscal, y explicó ante un nutrido grupo de empresarios alemanes sus reformas a nivel laboral, impositivo y administrativo, con las que pretende ahorrar hasta 50.000 millones de euros para 2017.

La “espiral de la deuda pública” en la que está Francia, que no ha logrado un presupuesto nacional equilibrado en cuatro décadas, es “insostenible».

A su juicio, sin embargo, el énfasis en Europa no debe asentarse tanto en la austeridad como en la dinamización de la economía- “Para reducir nuestro déficit necesitamos más ingresos, más crecimiento y más inflación».

“Es crucial que los planes de reducción del déficit público se adapten a la situación de la economía real”, afirmó Valls, que consideró que el cumplimiento de los límites fijados para París es “imposible” a nivel social, técnico y político.

El primer ministro francés tildó de “clichés” y “exageraciones» algunas de las críticas que en Alemania se lanzan contra Francia por su actual estancamiento económico.

Valls, consciente de los “obstáculos” y “mentalidad conservadora» que dificultan el cambio en Francia, consideró que las reformas que implementó Alemania hace una década bajo la denominada Agenda 2010 del entonces canciller socialdemócrata Gerhard Schröder son fuente de “inspiración” para su país.