No digo que el informe contenga toda la verdad, sólo la verdad y nada más que la verdad, jurada ante el Cristo con la mano derecha sobre la Biblia frente al Gran Tribunal, pero se aproxima a ella. Teniendo en cuenta los acuerdos partidarios y pasadas experiencias de repartideras de cargos, las recientes actitudes de sumisión o impotencia del Senado y el sistema patrimonialista y clientelar imperante que hace del Jefe del Estado un semi-dios al que se le debe veneración y obediencia, más que respeto, me parece que lo observado por un colega amigo, testigo ocular de lo ocurrido en la primera y segunda vista pública de Consejo Nacional de la Magistratura para escoger a los magistrados del Tribunal Superior Electoral, merece entera credibilidad.
Resumo sus impresiones y juicio sobre ese acontecimiento.
1. Fue incorrecto que no dejaran entrar a la prensa y la recluyeran en un cuarto aislado sin más acceso que el resto de la población. 2. La voz cantante la llevó Leonel, todo el tiempo. 3. Los demás miembros del Consejo lucieron extremadamente pasivos, opacos, o tímidos, incluyendo a Subero, 4. Se notó que ninguno de los miembros del CNM había preparado las entrevistas. 5. Era obvia la improvisación. 6. La inmensa mayoría de los aspirantes se quemaron con preguntas tan sencillas, aun reformuladas por el Presidente para facilitarles la respuesta. 7. La mayoría de los aspirantes se mostraron extremadamente inseguros. 8. No hubo preguntas sobre vinculaciones partidarias. Conclusiones: Lo ideal hubiese sido que un equipo profesional hubiese trabajado en las preguntas a formular, diseñadas con la intención de verificar si los aspirantes reúnen un perfil previamente definido. Las preguntas no persiguen un fin predeterminado. Este primer día demostró que si las evaluaciones serán como las realizadas podríamos ahorrarnos la pasarela y darle facultad al CNM para que uno sólo, con un solo dedo, elija.
Segundo reporte. La segunda sesión mantuvo la mismas características que la primera: 1. Comenzó con notable tardanza. 2. Nuevamente el presidente Fernández concentró la mayor parte de la actividad. 3. Hubo poca participación de los restantes miembros. 4. No hubo variación en cuanto a la improvisación. 5. Las preguntas eran del mismo tipo. 6. No hubo un trabajo de preparación previo como exige tarea tan delicada. 7. No se preguntó, en ningún momento, sobre la trayectoria partidaria de los candidatos oficialistas ni del PRD. 8. Sin embargo, la participación de candidatos fue mejor que la primera vez. 9. El Presidente mostró su preferencia: el Dr. Luciano no necesitaba estar allí. No tiene que demostrarle nada a nadie. Una mera formalidad. Conclusión: Esta segunda sesión permitió demostrar que si existiese voluntad política, se podría escoger un excelente TSE, con miembros independientes, íntegros y capaces, aunque escasos.
Al entregar estas notas, todavía el CNM no ha concluido su labor. Pero no es aventurado predecir lo que va a pasar en medio de estos nubarrones: un par de candidatos, con luz propia, podrán ser escogidos por la partidocracia como moneda de coleccionistas. Buenas para ser exhibidas. Arropados por el oficialismo, demostrarán que aquí funciona la democracia infuncional.