Dicen que hay trenes que solo pasan una vez en la vida. Para algunos actores y actrices, los trenes son papeles golosos que se convierten en enormes éxitos de taquilla y, a veces, también de crítica. Ofrecemos algunos ejemplos de estrellas que, por una razón o por otra, rechazaron papeles que acabaron en manos de otros que los hicieron históricos.
Gwyneth Paltrow. En 1997 el mítico filme “Titanic” rompió récords de taquilla y, hasta que “Avatar”, en 2009, y “Avengers: Endgame”, en 2019, le quitaron el puesto, fue la más taquillera de la historia. “Titanic” fue la cinta que hizo que las carreras de Kate Winslet y Leonardo DiCaprio se disparasen hasta el estrellato.
En una entrevista con Howard Stern, en 2015, Paltrow admitió que había rechazado un papel en “Boogie Nights” y se mostró esquiva a la hora de hablar de “Titanic”.
“Mi madre me matará si hablo de papeles que descarté”, dijo la actriz para añadir después que ya no podía cambiar el pasado.
Will Smith. Podría haber dado vida al personaje de Neo, el protagonista de la trilogía “Matrix” de las hermanas Wachowski.
Se desconocen las razones por las que dijo que no a ese trabajo, pero finalmente fue Keanu Reeves el que dio vida al elegido en la guerra de los hombres contra las máquinas.
La historia se repitió con “Django Unchained”, del realizador de Tennessee, Quentin Tarantino, personaje que Smith decidió dejar pasar por diferencias creativas.
John Travolta. Tom Hanks ganó su segundo Óscar con “Forrest Gump”, pero antes de que el guión llegase a manos de Hanks, pasó por las de otro peso pesado, John Travolta, protagonista de “Grease”, quien lo descartó por una buena razón. Travolta dijo que no a ser Forrest, para poder dar vida a Vincent Vega en la genial “Pulp Fiction”, de Quentin Tarantino.