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La población dominicana debe exigir los derechos ciudadanos que consagra la Constitución de la República y otras leyes, ya que estos no se regalan, sino que se conquistan.
Así lo plantearon ayer varios exponentes durante el análisis de coyuntura sobre La participación ciudadana, efectuado en el Centro Bonó, donde participaron organizaciones de diferentes lugares del país.
Frank Cáceres, subdirector del Consejo Nacional de Reforma del Estado (Conare) destacó la importancia de emprender procesos para que los ciudadanos se empoderen y exijan el cumplimiento de las leyes.
Las conquistas sociales no se regalan, las conquistas sociales se arrebatan, expresó Cáceres, quien agregó que de esa manera los cambios se hacen más profundos y duraderos para una sociedad más justa y equitativa.
Consideró que los ciudadanos no deben conformarse con delegar sus derechos cada cuatro años mediante el voto, sino que deben aprender a controlar y exigir para que verdaderamente se desarrolle una democracia participativa.
En cambio, Radhamés Martínez, coordinador de Participación de Conare, explicó que todas las normas aprobadas en los últimos 15 años, incluida la reciente Constitución, establecen mecanismos de participación ciudadana, pero debido al desconocimiento la gente no lo exige.
Por eso, sostuvo, la necesidad de divulgar en la sociedad los diferentes mecanismos de participación que tienen a disposición para demandar cumplimiento de las leyes, transparencia, rendición de cuentas, servicios y democracia.
Magino Corporán Lorenzo, del Foro Ciudadano y representante en el Consejo Nacional de la Seguridad Social (CNSS) de los discapacitados, indigentes y desocupados, resaltó la importancia de la participación ciudadana para que cumplan leyes como la 87-01 que crea el Sistema Dominicano de la Seguridad Social (SDSS).
Expresó que sin el poder que ejercen los ciudadanos hace tiempo que las clínicas privadas, las administradoras de riesgos de salud y prestadoras de salud hubieran hecho trizas el sistema.
Recordó que en diciembre de 2006 la sociedad influyó para que comenzara el Seguro Familiar de Salud (SFS).
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La participación
Magino Corporán señala que hasta 2006 la participación de la sociedad civil fue muy débil, lo que retrasó la entrada del componente de salud en el SDSS, de ahí que todavía el acceso a ese servicio sea débil. Ilustró su exposición con el caso más reciente de las clínicas privadas que pretendieron aumentar las tarifas a los usuarios, lo que no fue posible por la oposición ciudadana.
