CIUDAD DEL VATICANO, (AFP) – Un prelado del Vaticano se felicitó ayer por el anuncio de que científicos estadounidenses y japoneses consiguieron transformar células de la piel en células madre por considerar que eso elimina los problemas éticos asociados al uso de embriones para este fin.
«La nueva investigación no parece conllevar problemas éticos», explicó a la agencia de noticias religiosa I-Media monseñor Elio Sgreccia, presidente de la Academia Pontificia para la Vida.
La Iglesia católica no «se entromete en los procesos técnicos, sólo se preocupa si un método daña o no la dignidad humana. Para el resto, la ciencia es libre de investigar», recalcó Sgreccia.
Es en nombre del respeto a la dignidad humana que la Iglesia «siempre sostuvo la ilegitimidad de la clonación humana y combatió la destrucción de las células madre embrionarias», recordó el prelado.