Los gobiernos locales suelen ser más eficaces, eficientes y responsables ante las demandas de la población que los gobiernos centrales, dijo anoche Jean-Paul Faguet, directivo del Instituto de Estudios sobre Desarrollo de la London School of Economics  (LSE), de Inglaterra.

Los gobiernos centrales, señaló, están más dirigidos a la economía y la producción industrial, mientras que los locales se preocupan por solución a problemáticas de la educación, salud, alcantarrillado y agua potable.

 La descentralización lleva el gobierno más cerca de los ciudadanos, agregó. Explicó que en este proceso, para una buena gestión, deben intervenir tres elementos: información, participación y rendición de cuentas.

El aspecto de la información tiene importancia porque los habitantes de los municipios conocen las acciones de las autoridades y cómo actúan.

Farguet pronunció la conferencia  “Descentralización desde arriba, gobernabilidad desde abajo”, en la Fundación Global Democracia y Desarrollo (FUNGLODE). El charlista fue presentado por María Elizabeth Rodríguez, directora de proyectos de la entidad.

Definió la descentralización como la transferencia por parte del gobierno central a gobiernos democráticos locales de funciones específicas, con todos los atributos administrativos, políticos y económicos que estas funciones implican.

Otra de las características, de acuerdo a la experiencia, es que los gobiernos centrales invierten más en los municipios ricos y los locales en los más pobres

 El especialista de LSE afirmó que la descentralización se ha convertido en uno de los temas de política más debatidos en las últimas décadas.

 Faguet es miembro del Centro Internacional Suntory&Toyota  sobre Economía y Disciplinas Relacionadas y del Instituto de Estudios sobre América Latina. Desde  el año 2001 está envuelto en el grupo de Trabajo de Descentralización: Iniciativa para una política de diálogo.

Farguet realizó un estudio sobre la descentralización en Bolivia, citando los extremos de los municipios de Viacha, donde predominaba la corrupción, y Charagua, que se caracterizaba por una gestión eficiente y honesta.

“La inversión que se hace bajo la descentralización es más equitativa que la que se hace bajo gobiernos centrales”, señaló el especialista en temas económicos, Farguet.