La reciente reducción de 25 puntos básicos a la Tasa de Política Monetaria (TPM), pasando de 7.00% a 6.75 % anual, realizada por el Banco Central de la República Dominicana (BCRD), puede interpretarse como el inicio de posteriores recortes, los cuales deben acompañarse de una política monetaria más expansiva si se busca alcanzar el crecimiento económico entre 5.1 y 5.2% del producto interno bruto (PIB) proyectado para final de año.
Así lo consideró el economista Alejandro Arredondo, quien agregó que para el efecto deseado de esa medida, es necesario que el BCRD no solo continúe con los recortes en la tasa de referencia, sino, que también inyecte liquidez al mercado, lo que permitirá una reducción significativa de las tasas de interés activas, que son las que impactan directamente a los consumidores y a los sectores productivos.
Puede leer: Departamento Aeroportuario iniciará construcción Helipuerto de Santiago
Sin embargo, Arredondo puntualizó que es importante recordar la frase del premio Nobel de Economía, Milton Friedman, “en economía no hay tal cosa como un almuerzo gratis”.
“Nos referimos a que un aumento de la liquidez, generalmente conlleva presiones al alza en la tasa de cambio, como se produjo entre los años 2020 y 2023”, añadió.
Recordó que recientemente el presidente de la Reserva Federal de los Estados Unidos (FED), Jerome Powell, ofreció algunas señales sobre recortes en la TPM en ese país, a partir de septiembre del presente año, por lo que esa decisión del BCRD parece alinearse con esa expectativa.