La literatura dominicana tiene hoy un gran hueco por la partida del escritor Alexis Gómez Rosa. Esta fue una de las tantas expresiones dichas por personalidades del mundo intelectual y académico, que acudieron ayer a darle el último adiós al fundador del Círculo Literario La Antorcha, en la Funeraria Blandido de la Abraham Lincoln.
En el velatorio algunos de sus más cercanos allegados, como Mateo Morrison, Premio Nacional de Literatura 2010, describieron a Gómez Rosa como el poeta de mayor proyección de la literatura dominicana en los últimos 50 años.
Morrison lo definió como un escritor exigente consigo mismo y con los demás, poseedor de una literatura diversa, donde tocó dentro de la poesía libre prácticamente todas las cuerdas, desde el poema tradicional hasta el experimental.
“Cultivó como nadie la forma literaria japonesa del Haikú”, dijo Morrison, quien lamentó la muerte no sólo de este gran poeta, sino de quien fuera su amigo y compañero.
“El 21 de mayo del año de 1967, fundamos el círculo literario La Antorcha junto a Rafael Abreu Mejía, Soledad Álvarez, Enrique Eusebio”, recordó como anécdota.
De su lado, el académico César Zapata describió a Gómez Rosa en su dimensión humana como una persona preocupada por los demás y su denuedo por contribuir a las mejores causas del país.
“Desde el Ministerio de Cultura se dedicó a que muchos intelectuales se insertaran en el tren burocrático del Estado Dominicano, en su condición de miembro de una organización político cultural”, indicó.
Resaltó sus condiciones poéticas, las cuales le ayudaron a cultivar prestigio y reconocimiento internacional. “Era un consagrado a la literatura”, apuntó.
Hablan sus familiares. Para sus hermanas Ann, Yanet y Katheryn Gómez, el legado de Alexis es extenso, incólume y que va a perdurar toda la vida. “Es una gran pérdida a la prosa, a la poesía y a la literatura, su partida”, dijo Ann Gómez.
Para Yanet, el recuerdo del escritor dominicano será por su profundo amor por la patria y la familia.
Katheryn Gómez explicó que al igual que su padre, Juan Francisco Gómez, que fue la antorcha de la familia, Johnny, como cariñosamente le llamaban a Alexis Gómez, fue su pilar.
Sobre donde será sepultado
Yelidá Gómez, la más pequeña de los tres hijos de Alexis, dijo que este amaba la música y lo califica como un hombre culto, muy empapado de informaciones e importantes acontecimientos de la historia. Explicó que los restos de su padre serán cremados, pero que hasta el momento no han decidido si llevar sus cenizas a Estados Unidos o dejarlas aquí, el país que más amaba.