Un grupo de empresarios artísticos y de eventos rechazaron ayer la medida del Gobierno, que restringe las fiestas masivas públicas o privadas en las zonas de playa durante el asueto de Semana Santa, la que calificaron de arbitraria y en detrimento del sector.
En rueda de prensa, en un restaurante de la capital, lamentaron que las autoridades hayan tomado la decisión sin notificarlo y que de mantenerse la medida perderían cientos de millones de pesos, ya que tienen decenas de eventos preparados, artistas contratados y miles de habitaciones reservadas y boletas vendidas.
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“Esta es un medida que atenta contra el derecho a la libre empresa, es discriminatoria, dictatorial, clasista y contraria a todo lo que promueve el Estado, sobre inversión nacional y extranjera”, expresó el abogado José Martínez Brito, vocero de los empresarios artísticos y de eventos.
Lamentó que luego de que ellos pidieron los permisos y pagaron los impuestos correspondientes para realizar esos eventos, de la noche a la mañana las autoridades decidan cancelar esas actividades, sin hacerle ninguna notificación, ya que se enteraron en los medios de prensa.
Martínez Brito indicó que apelan al buen juicio de las autoridades para reconsideren la medida, porque de no hacerlo sería un gran golpe a esos empresario, que han hecho inversiones millonarias para organizar esos eventos, algunos de los cuales tienen hasta cerca de 20 años realizándose en estas festividades.