La crisis económica tocó fondo en los hospitales del Instituto Dominicano de Seguros Sociales (IDSS), en donde la emergencia está hacinada y saturada de pacientes y casi todos los servicios a punto de colapsar. Para analizar la situación de crisis que mantiene en la cuasi inercia al hospital Salvador B. Gautier, sus médicos convocaron una asamblea en la que se tomarán decisiones al respecto.

Los doctores Freddy Ferreras, jefe del Servicio de Otorrinolaringología, y Fulgencio Severino, de Cardiología, aseguran que la situación es insostenible. Este hospital, el más emblemático en la formación de especialistas y en la parte clínica, no tiene área de imágenes, el tomógrafo lleva años dañado, no hay cateterismo, ni cirugías cardíacas. La respuesta inmediata de las autoridades del IDSS es que no hay dinero para arreglar los equipos que están dañados.

Los hospitales del IDSS tienen 13 subvenciones atrasadas, sobreviven por lo que pagan los pacientes privados que buscan servicios en esa red, aseguran los dos especialistas. Pacientes con infartos, accidentes cerebro vasculares, edemas pulmonares y sangrados intestinales clamaban ayer atención en una emergencia atestada de gente, calurosa y desorganizada. Todo el crédito está agotado y el centro no tiene las puertas abiertas en ninguna casa comercial, mientras el deterioro de las áreas es cada vez más progresivo.