POR GERMAN MARTE
La declaración jurada de bienes del ex presidente Hipólito Mejía por un monto de RD$46.5 millones podría considerarse como «el fardo de la prueba» por lo que debería ser investigado por las nuevas autoridades, consideró ayer la doctora Aura Celeste Fernández, ex comisionada de Apoyo a la Reforma y Modernización de la Justicia.

Fernández adujo que según lo que se ha publicado el patrimonio de Mejía se amplió demasiado en cuatro años.

«A mí tendrían que convencerme de la inocencia del ex presidente Hipólito Mejía respecto de la declaración jurada que él hace de sus bienes activos y pasivos», dijo Fernández.

Consideró que las cifras envueltas en la declaración del ex mandatario revelan un dimensionamiento muy alto del su patrimonio en relación a lo que tenía cuando comenzó sus funciones como presidente hace cuatro años.

Al concluir su mandato, Mejía declaró un patrimonio de RD$46,502,919.93. Cuatro años atrás, al asumir la presidencia había declarado RD$19 millones.

Sostuvo que los ingresos de un presidente no posibilitan que en cuatro años pueda acrecentar tanto su patrimonio, tomando en cuenta que parte de su salario lo gasta en mantenerse.

Lo más penoso y cuestionable, agregó la directora de postgrados de UNIBE, es la subvaluación que se ha hecho de sus propiedades.

«Sobre todo esa famosa casa de Jarabacoa, que es una casa de un príncipe antojado, evidentemente de un príncipe lleno de antojos en exquisiteces en un país pobre. Y la casa de San Cristóbal también», expresó la abogada.

Consideró que las valoraciones de las casas, lo mismo que los vehículos no se corresponde con la verdad, «el valor es mucho más alto».

Adujo que una casa con carretera privada, con un invernadero y las demás exquisiteces no es verdad que tiene el precio que indica el ex mandatario en su declaración jurada, pues ya cualquier casita o un apartamento sin patio vale RD$6 millones.

Desde ese punto de vista, subrayó Fernández, habría que cuestionar también al contador que firmó la declaración jurada y que afirmó que esos bienes tienen ese valor, porque se supone que un contador tiene fe pública.

Fernández ofreció sus declaraciones al participar en la Mesa Redonda sobre Transparencia y Gobernabilidad organizada por la Fundación Institucionalidad y Justicia. En el evento se analizaron los planes anticorrupción del Departamento de Prevención de la Corrupción.

La doctora Fernández señaló que se han hecho estimaciones que indican que los funcionarios públicos se roban el 20% del presupuesto nacional.

«Evidentemente, la corrupción es la causa número uno de la precaria situación en que viven la mayoría de los dominicanos», manifestó.

Estimó que si el país contara siempre con funcionarios públicos honrados, el dinero diera para que casi todos los dominicanos vivan dignamente.