El presidente Nicolás Maduro anunció el viernes que la delegación del gobierno de Venezuela se mantendrá fuera de las negociaciones promovidas por Noruega hasta la oposición rectifique sobre los supuestos planes para entregar el Esequibo, un territorio que está en disputa con Guyana.

Durante un encuentro con gobernadores, Maduro atacó con dureza al líder opositor Juan Guaidó, al que acusó de pretender entregar el Esequibo, y dijo que mientras él no rectifique su postura los delegados oficialistas seguirán “levantados de esa mesa diálogo por la dignidad, por la soberanía de nuestro territorio“.

“O rectifican, o no nos ven la cara más“, dijo el mandatario izquierdista, y agregó que notificarían a la delegación de Noruega sobre la decisión.

El gobierno suspendió a comienzos de agosto la participación de sus delegados en las conversaciones con la oposición que se tenía previsto realizar en la isla caribeña de Barbados, en la continuación del proceso de negociaciones promovido por Oslo.

Asimismo, se acordó someter a revisión el mecanismo de negociaciones. El mandatario tomó la decisión pocos días después que Washington ordenara congelar todos los activos del gobierno de Venezuela en Estados Unidos y prohibiera a los estadounidenses hacer negocios con Caracas para presionar el derrocamiento de Maduro.

A finales del mes pasado, Maduro informó que se habían retomado los contactos con la oposición en el marco del mecanismo impulsado por Oslo desde mayo, pero hasta la fecha no se habían dado nuevos encuentros entre las partes.

La declaración de Maduro coincidió con el anuncio que realizó la Fiscalía General de Venezuela sobre la apertura de una investigación penal contra Guaidó y dos de sus colaboradores por supuestas negociaciones para que Venezuela desistiera del reclamo por el Esequibo.

Al anunciar el inicio del proceso, el fiscal general Tarek William Saab dijo a la prensa que Guaidó y sus colaboradores participaron en “negociaciones ilegales“ a espaldas del país para que se desista del reclamo a cambio del apoyo político del Reino Unido a la presidencia interina del líder opositor.

Además de Guaidó serán procesados por el caso Vanessa Neumann, representante del dirigente opositor en el Reino Unido, y Manuel Avendaño, coordinador de la oficina internacional del gobierno interino. Saab no precisó cuáles son los delitos que se les imputan.

La Cancillería de Chile anunció la noche del viernes, en un comunicado que publicó en su página de internet, que Avendaño ingresó a la residencia del embajador chileno en Caracas “en busca de protección» y que se le dio reguardo en calidad de “huésped».

Chile defendió la medida alegando que está “fundada en circunstancias políticas conocidas», y que actuará en consecuencia a los principios jurídicos y humanitarios. En la sede diplomática también están alojados los opositores Freddy Guevara y Roberto Enríquez.

“El régimen usurpador no podrá desviarnos de nuestro objetivo», expresó Avendaño en su cuenta de Twitter al agradecer el apoyo a Chile. Ante el nuevo proceso emprendido en su contra, el jefe de la Asamblea Nacional respondió que “no nos van a confundir ni distraer“.

Durante una concentración con seguidores en el estado oriental de Anzoátegui, Guaidó acusó a Maduro de estar “entregando la soberanía nacional permitiendo que grupos irregulares narcoterroristas actúen en Venezuela».

La apertura del proceso se da un día después de que Maduro pidiera a la Fiscalía General actuar contra Guaidó por el delito de “traición a la patria“ por promover supuestas negociaciones para la entrega del Esequibo, territorio por el que Venezuela y Guyana mantienen una disputa limítrofe desde hace varias décadas.